Domingo 30 de Abril de 2006, 12:27

29 AÑOS DE LUCHA DE LAS MADRES DE PLAZA DE MAYO

| Tras 29 años de la primera ronda llevada adelante por las Madres de Plaza de Mayo, el Diputado Provincial, Dr. Julio César Aldáz expresó que “fueron la reserva moral de los argentinos durante los años de plomo de la dictadura militar, constituyéndose en un foco de luz y esperanza durante esos años negros”.

El 24 de marzo de 1976, un golpe militar destituyó a la entonces Presidente Constitucional, María Martínez de Perón con el pretexto de poner orden , pero el orden que impusieron fue el del terror y la muerte. Se secuestraron y asesinaron a miles de personas que inicialmente fueron conducidos a lugares clandestinos de detención, donde fueron detenidos ilegalmente, salvajemente torturados y finalmente, en su mayoría asesinados. La palabra “Desaparecidos” se comenzó a utilizar para identificar a las personas secuestradas que nunca regresaron a sus hogares. Fue en la antesala del Vicariato de la Marina donde, indignada por las burlas y la humillación a las que eran sometidos por los funcionarios de la dictadura, Azucena Villaflor le propone a otros familiares comenzar a reunirse en la Plaza de Mayo para reclamar públicamente por la vida de sus seres queridos. “Individualmente no vamos a conseguir nada ¿ porqué no vamos todas a la Plaza de Mayo? expresaba Villaflor . Se eligió la histórica Plaza de Mayo como sitio de las reuniones porque “allí se produjeron , a través de los años, las más grandes concentraciones y los hechos políticos y sociales significativos del país”. Provenían de diferentes sectores sociales, las unían sus desaparecidos y juntas desde una cierta ingenuidad primera, lograron con el tiempo una cierta sabiduría. Fueron escuchadas y adquirieron fuerzas por que sus reclamos eran legítimos, mientras que la dictadura carecía de toda legitimidad. Su prestigio creció en todo el mundo, donde surgieron grupos de Madres que imitaron la acción de las Madres de Plaza de Mayo. Cuando la dignidad de un pueblo estaba sometido a la peor de las dictaduras, con lluvia o con sol, pese a la represión y a las provocaciones humillantes, ellas siempre estuvieron presentes. Las desapariciones de Azucena Villaflor de De Vicenti, Ester Ballestrino de Careaga y María Ponce de Bianco, resintió el grupo, quitando sus aportes, sus presencias, pero sus ejemplos y sus ideas germinaron hasta extenderse como verdad a todo el pueblo argentino . El primer encuentro de madres de hijos secuestrados se hizo en la Plaza de Mayo el 30 de abril de 1977 a las cuatro y media de la tarde. Era sábado. No había gente. Las 14 mujeres que participaron de la primera ronda son las siguientes: Azucena Villaflor, Josefa de Noia, Raquel de Caimi, Beatriz de Neuhaus, Delicia de González, Raquel Arcusín; Haydée de García Buela; Mirta Acuña de Baravalle; Berta Zeff de Brawerman; María Adela Gard de Antokoletz y sus tres hermanas, Cándida, María Mercedes y Julia Gard. La número catorce fue una muchacha que no dio su nombre: era una chica del Partido Comunista, pero como su partido no estaban con estas madres, no podía aparecer y contradecir sus directivas. Como dijera el escritor Julio Cortazar: “ Sigamos siendo locos, madres y abuelitas de la Plaza de Mayo, gentes de pluma y de palabra, exiliados de dentro y de fuera. Sigamos siendo locos, argentinos: no hay otra manera de acabar con esa razón que vocifera su slogan de orden, disciplina y patriotismo. Sigamos lanzando las palomas de la verdadera patria a los cielos de nuestra tierra y de todo el mundo”.