Campamento Calá, parte de la historia entrerriana y argentina

Este viernes se hizo el acto de apertura de la puesta en valor del antiguo Campamento Calá. Tarea que silenciosamente realizó un grupo de vecinos de Rocamora y Basavilbaso, conocidos como "Amigos del Calá", que tiene su orígen en la impronta del Profesor Gastón Buet. Asistieron a la ceremonia -entre otras autoridades- el Ministro de Turismo de Entre Ríos, Adrián Fuertes, los Indendentes de Basavilbaso, Gustavo Heiin, y Rosario del Tala, Hugo Pitura, y el Presidente de la Junta de Gobierno de Rocamora, Rubén Bonín. Hubo destreza de jinetes que representaron ser del Ejército Grande del General Justo José de Urquiza, quien -representado por un actor- llegó al acto -entre salva de bombas de los cañones recuperados- escoltado por sus lanceros. Como no podía ser de otra manera también hubo un espacio para la música, reservado para el músico local Omar Olivera que fue acompañado en las glosas por Miguel "Lito" Gregoraschuk. El Campamento Calá fue el centro de preparación de las fuerzas de Urquiza para las campañas de Corrientes entre 1845 y 1847; lugar donde se concentró el ejército que luchó por la organización nacional y triunfó en la batalla de Caseros -3 de febrero de 1852-. Reconocido como "Lugar Histórico Nacional" mediante Decreto 2840 de 1983, y gracias al trabajo incansable de un grupo de entusiasta se logró localizar el polvorín que el general López Jordán utilizó para organizar las tropas entrerrianas en abril de 1870, -a raíz del asesinato de Urquiza-, para luchar con las fuerzas nacionales que envió el presidente Domingo Faustino Sarmiento a título de intervención, y que tanta sangre estéril debía costar a la provincia en ese triste período de la guerra que terminó en diciembre de 1876 con la prisión del caudillo revolucionario después del combate de Alcaracito. "El campamento tenía herrerías, enfermería, escuela, pulpería y hasta una capilla. Las construcciones eran en su mayoría de adobe y paja", precisó Buet que comentó que aspiran poder construir un par de habitaciones, un corral de palo a pique y el amansadero de caballos, la cifra de equinos llegó a ser de 30 mil", contó el Profesor Buet. Es de destacar lo logrado de la puesta realizada por los actores que representaron al General Urquiza, sus lanceros y Alejo Peyret. Y de los militares del Grupo de Artillería Blindado 2, de Rosario del Tala, que contribuyeron a recrear momentos históricos ocurridos en el corazón de Entre Ríos. Fotos: Hermes Dante Quattrochio.