Jueves 30 de Agosto de 2007, 11:13

EL FERROCARRIL CUMPLE 150 AÑOS

| Un 30 de agosto de 1857, el Gobernador de Buenos Aires, Valentín Alsina inauguraba el primer ferrocarril argentino. El sistema fue un factor de desarrollo económico que facilitó la colonización de una gran parte de nuestro dilatado territorio argentino. Se cumplen 150 años de aquel momento en que un grupo de visionarios pusieron los primeros rieles para unir y fundar pueblos, mientras que hoy tenemos un presente con menos vías y un servicio que dista de aquel sueño pionero.


Argentina tiene alrededor de 34 mil kilómetros de vía, insuficientes para semejante geografía; gran parte de ellos en desuso y otros que verdaderamente no hacen honor al coraje de los soñadores que empezaron el proyecto de desarrollo integrador del ferrocarril. Basavilbaso nacida a la vera del antiguo Ferrocarril Central Entrerriano en 1887, con el tiempo su estación y sus talleres se transformaron en un importante "Nudo Ferroviario". Éramos con todo orgullo, el corazón ferroviario de Entre Ríos, alrededor del cual se movía toda la actividad pueblerina, que al cerrarse dejó un vacío muy difícil de llenar, que mediante la concesión del servicio, fue pasando a manos privadas, que no pudieron, no quisieron o no supieron mantener este vital servicio de transporte. El cierre del ferrocarril significó para la ciudad de Basavilbaso un gran atraso, muchas familias quedaron desamparadas y las indemnizaciones que recibieron los trabajadores no fueron bien empleadas porque nadie se ocupó de aconsejarlos y orientarlos. Basavilbaso fue impactada con la llegada de los primeros telegramas de despidos y sus habitantes resultaron meros espectadores de estos sucesos, donde no pudieron dimensionar que la crisis no sería únicamente de los empleados sino de toda la comunidad y no se mostraron solidarios, marginando a los desocupados y a su grupo familiar, quienes padecieron severos trastornos mentales, que ocasionaron el quiebre de la vida conyugal como lo son la depresión, la violencia familiar, la imposibilidad de la reinserción laboral hasta llegar al suicidio de algunos ex obreros ferroviarios en el que fuera su lugar de trabajo por mucho tiempo, los galpones del ex Ferrocarril Urquiza tenía en la localidad. [b]Con la vuelta del tren renace la esperanza[/b] En el año 2003 volvió a correr un tren diario de pasajeros. Una sociedad del Estado Provincial y la empresa América Latina Logística (ALL) permite unir las estaciones Basavilbaso y Villaguay, lo que favorece a los sufridos habitantes de los pueblos que se encuentran a la vera de la Ruta Provincial Nº 20, y la Empresa Trenes Especiales Argentinos (TEA) puso en marcha, después de más de una década, “El Gran Capitán”, que hace el recorrido entre Federico Lacroze, en la Ciudad de Buenos Aires y Posadas. El primero nace de un acuerdo entre el gobierno provincial, los centros comerciales y los municipios de la zona y el segundo pertenece a capitales privados nacionales. Ambos servicios devolvieron la esperanza de una recuperación paulatina del sistema. La lucha que a diario se da contra la indiferencia, la desidia y la falta de compromiso y colaboración de funcionarios y la empresa concesionaria del ramal (ALL) no lograron borrar el sueño de quines insisten que la provincia necesita acoplarse al desarrollo de las comunicaciones, y recuperar el ferrocarril como medio de transporte, el más seguro y económico, el que menos daño ocasiona al medio ambiente y el que mejor ayuda al estado a cumplir su función social, y además sería una histórica reparación a los pueblos como Basavilbaso llevando el mensaje de la vida a poblaciones que cayeron en el olvido y el abandono producto de las políticas neoliberales de los ‘90 y el regreso del servicio de trenes de pasajeros recreará la gesta heroica, plena de sacrificio y trabajo, que plasmó sobre montes y soledades, el camino del progreso. El transporte ferroviario actuaría como integrador del espacio geográfico provincial, que hoy se observa como un verdadero mosaico de necesidades insatisfechas a razón de la falta de comunicación, dando prioridad las necesidades de la gente por encima de lo económico y de acuerdo a un relevamiento efectuado en las localidades que se encuentran a la vera de los ramales ferroviarios, 600.000 entrerrianos recuperarían su interacción con la región, rompiendo así con el aislamiento que sufren desde el cese de la actividad ferroviaria en todo su potencial. Se requerirá de mucho esfuerzo, de grandes inversiones económicas y especialmente del compromiso de los gobernantes, pero se confía que así como en un momento de nuestra historia la nacionalización de los ferrocarriles constituyó un categórico gesto de soberanía e independencia, para ello dieron el primer paso el Diputado Nacional y Vicegobernador electo, Dr. José Eduardo Lauritto , el Diputado Provincial, Dr. Julio César Aldáz junto a la Concejal de Basavilbaso Perla Battilana y los ex trabajadores ferroviarios de las ciudades de Concordia, Basavilbaso y Concepción del Uruguay con un proyecto para recuperar el servicio ferroviario de pasajeros en entre Ríos, como así también los de carga en aquellos ramales que la concesionaria ha clausurado, dinamizando así áreas del territorio que han quedado marginadas de los procesos de desarrollo. Especial: Silvio Gorge y Juan Lacuadra. Hijos y nietos de Ex ferroviarios. Foto: Jorge Corrá.