Domingo 31 de Marzo de 2013, 02:33

El Padre Raúl encabezó la Vigilia Pascual

| El Padre Raúl presidió en la noche de este Sábado Santo la Vigilia Pascual, en cuya homilía dijo que "el Papa está en el Vaticano, lejos de nosotros", por lo que "está en nuestras manos lo que queremos sea nuestra iglesia".


"Cristo ayer y hoy, principio y fin, alfa y omega. A Él pertenece el tiempo y los siglos, a Él la gloria y el poder por los siglos de los siglos", dijo el Padre Raúl Läderach al comenzar la procesión hacia el altar mayor de la Parroquia "San José Obrero", en medio de una total oscuridad en el templo, iluminado poco a poco con las velas de los fieles, que fueron encendidas una a una con la llama procedente del Cirio Pascual, que colmaron las instalaciones. Una vez que Läderach llegó al altar se encendieron todas las luces y comenzó el a cantar el Coro "San Agustín". Siguiendo la tradición cuatro pequeños fueron bautizados por el Sacerdote vestido con ornamentos blancos. Durante la homilía al Padre Raúl afirmó que Benedicto XVI y Francisco "son iguales", "los dos aman a la Iglesia, tienen una gran formación". "Benedicto XVI ha sido y Francisco lo es consiente de la enorme responsabilidad que significa conducir a la Iglesia. Son iguales", afirmó. Läderach se apresuró en aclarar que "los dos también son distintos, como cada persona" y al admitir que la designación del Cardenal Bergoglio causó una "sorpresa", el nuevo "sucesor de Pedro" nos llenó de entusiasmo. "Hemos palpitado esa alegría en los saludos, las redes sociales, en la comunicación y en las felicitaciones de unos para con otros". El sacerdote mencionó que Francisco inició su pontificado con los zapatos que Bergoglio utilizaba en Buenos Aires, mientras que Joseph Ratzinger cuando asumió como Papa optó por seguir la tradición de los zapatos rojos, color que simbolizan la sangre de Cristo y la de los mártires. Y señaló que esa es "una diferencia, de las tantas que hay entre los dos". Pero aclaró que "lo que importa es la capacidad de gestión, de conducir y orientar una institución tan compleja como lo es la Iglesia". Seguidamente dijo "el Papa está en el Vaticano, lejos de nosotros", por lo que hizo saber a los fieles de Basavilbaso, que colmaron el templo, que "está en nuestras manos lo que queremos sea nuestra iglesia" Además hizo votos por que la alegría que significó que la elección del Papa recayera en un argentino se mantenga, "que no sea un fogonazo. Debe perdurar a través del tiempo", porque "así nuestra iglesia será más luminosa, radiante y comprometida".