PROPONEN CAMBIOS EN EL MODELO DE PRODUCCIÓN

“Las fumigaciones aéreas son una practica incorrecta y sumamente peligrosa porque las derivas pueden alcanzar hasta 15 kilómetros de distancia y afectan la salud de la gente. El envenenamiento es más terrible de lo que imaginamos”, sentenció y puso de ejemplo lo que ocurrió en un barrio de la ciudad de Córdoba donde un grupo de mujeres denominado "Las madres" después de perder niños decidió organizarse y hacer un relevamiento casa por casa descubriendo entre 300 y 500 casos de leucemia y enfermedades terminales. “El modelo rural de la soja ha instalado una mancha de leucemia, enfermedades terminales, abortos, malformaciones y sobretodo deficiencias intelectuales en los niños”, afirmó. Rulli reclamó una mayor presencia del Estado porque según entiende dejó todo en manos del mercado y por lo tanto “no hay control de nada”, dijo. Sobre la Ley de agroquímicos en Entre Ríos se quejó que nunca fuera reglamentada y por lo tanto consideró que “no tiene aplicación práctica”, y que en la medida que los municipios no se interesen del tema la vulnerabilidad de la gente se acrecienta. Asimismo cuestionó que las políticas de derechos humanos sean destinadas casi exclusivamente a los crímenes del terrorismo de Estado y no a los crímenes actuales que se comenten todos los días. Luego consideró “positivo” el haber logrado persuadir a la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, la que al escuchar los argumentos del Grupo de Reflexión Rural “nos respalda en esta campaña”, aseguró y que muchas de las muertes que se dan como consecuencia del modelo de producción también corresponden a un estado de ausencia de justicia que bien se podría llamar de impunidad. Seguidamente anunció que fueron convocados los medios de prensa de la zona, en el local de librería “El Tunel”, de Basavilbaso, donde se les contará detalladamente de las actividades que está realizando la organización, especialmente en las localidades de Gualeguaychú, Gilbert y Libaros, y sobre la demanda presentada en los tribunales por el caso de Las Masitas que tomara estado público por una serie de informes de la emisora. “El Grupo Reflexión Rural tiene presencia nacional importante, anticipó muchos de los problemas que ahora tenemos. Hace muchos años que venimos trabajando con mucha presencia en el campo internacional, especialmente en Europa, donde estamos persuadiendo a las ONG’s a participar de debates proponiendo que cada país de ese continente haga su propio forraje. Creemos que esta es una medida que podría aliviar este rol terrible que se nos ha dado de producir piensos. Argentina alguna vez producía los mejores alimentos del mundo, que recibió el reconocimiento de "granja del mundo", hoy produce forraje y el horizonte que se nos anticipa -según las propuestas gubernamentales- es que además de forraje produzcamos biocombustibles que se hacen con los mismos forrajes (con el aceite de la soja o con el etanol del maíz)”, detalló Rulli. “Es paradójico y doloroso que mientras hay 7 u 8 millones de personas que se van a dormir con hambre nuestra agricultura se ponga al servicio de abastecer el hambre de los motores europeos. Expresamos nuestro disenso y reclamamos en la democracia que vivimos que exista un debate sobre estos temas, porque al futuro de la agricultura lo deciden las corporaciones, nunca se debatió en el Congreso el tipo de agricultura que queremos para el país, no existe una Ley para la agricultura y esto nos avergüenza y por lo tanto hay que conseguir que estos temas sean incorporados a la agenda pública”. denunció Rulli que apuntó contra el Estado que a su entender “favorece una enorme producción de soja para quedarse con las retenciones y ocupar de allí una pequeña parte para financiar políticas sociales o clientelares. Es muy sencillo es la ecuación de un país de ñoquis y no merecemos este destino”, enfatizó. Consultado sobre si sería una buena medida que el Estado legisle la regulación del sistema actual de arrendamiento indicó que es una cuestión "fundametal", y planteó que si uno alquila un departamento cuando lo devuelve tiene que hacerlo respetando las condiciones en que lo recibió mientras que en los alquileres de los campos no existe ninguna garantía y por lo general lo regresan a sus dueños sin fósforo, sin materia orgánica: "un esqueleto" de la tierra y que al respecto un ex funcionario dijo que si se tomaran medidas en ese sentido el área de cultivo declinaría enormemente. “El dueño del campo sabe a lo que se atiene cuando arrienda. A la larga o la corta se queda sin campo y lo sabe pero no le importa, gana lo suficiente y se desinteresa por el futuro. Es evidente que ahí debe intervenir el Estado”, exclamó. Por último reclamó que se legisle en materia de mercado interno, idea que desapareció en los años '90 y que el presidente Néstor Kirchner “no contrarío al menemismo en esto”, señalando a Martín Redrado, uno de los directores del BCRA, como uno de los principales rectores de esto. “La gente se las arregla como puede, cuando muchas medidas del libre comercio se han contrariado, y consideró que sería bueno que se comiencen a aplicar nuevamente precios sostén para algunos cultivos, sobre todo aquellos que tienen directa relación con la mesa de los argentinos. Es indispensable revalorizar la idea del mercado interno y crear un mercado local en cada localidad del país”.