"Urribarri es potencial candidato a Presidente"

El filósofo, politólogo y ensayista argentino que desde 2010 incursiona en el periodismo gráfico -con columnas de opinión política en la Revista Veintitrés y anteriormente había colaborado con el periódico Miradas al Sur y el diario Tiempo Argentino entre otros- y en 2012 llegó a la televisión -como panelista estable en 6, 7, 8- respondió algunas preguntas que le hizo Damián Piccoli, un colaborador de RIEL FM. [b]-¿Que análisis te merece el nuevo panorama político tras los cambios en el gabinete?[/b] Hacía falta oxigenar, disipar algunas internas entre los ministros y dar señales de lo que será una nueva etapa. En esta línea, Moreno era una figura desgastada que era utilizada por los medios para achacarle todos los males del planeta y parecía necesario que la jefatura de Gabinete fuera asumida por alguien que forma parte del poder territorial de los gobernadores y estuviera vinculado al PJ. En el caso de Kicillof, es una figura con presencia y que tendrá en sus manos acciones importantes para modificar aquello que sea necesario modificar sin desviar el rumbo general. [b]-Saliendo del plano mediático (Lanata, TN, Clarín) ¿Que critica haces sobre las denuncias de corrupción de funcionarios y ex funcionarios, y de las denuncias de enriquecimiento ilícito?[/b] Las denuncias de corrupción son el yeite preferido del modo antipolítico de hacer política. Busca quitar credibilidad al gobierno y, por falaz pendiente resbaladiza, a todos sus logros. Pero la compulsión por la denuncia, en el fondo, más que debilitar al gobierno, debilita al sistema representativo y a la democracia. Eso es peligroso. En cuanto a las denuncias específicas y dado que no existe gobierno en el planeta exento de corrupción, quisiera que se investigue pero quisiera también que esas denuncias se diriman en los tribunales de justicia y no en los tribunales mediáticos. [b]-¿Cómo ves al Gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri de cara al futuro? Ya que se lo ha barajado como posible candidato a Vicepresidente (en las elecciones Presidenciales de 2011) y ahora se lo tuvo como posible Jefe de Gabinete y hasta se habla de una candidatura Presidencial para 2015.[/b] Es uno de los potenciales candidatos a Presidente en 2015 más allá de que la designación de Capitanich pareciera haberlo relegado por el momento. Pero falta mucho todavía. [b]-Un tema de los más cuestionados por la oposición y la opinión pública en este último tiempo es la inflación. Considerando que las rentabilidades obtenidas en la última parte de la cadena productiva (comercios minoristas y distribuidores) son porcentualmente más elevadas que las primera parte (productores e industrias); y, últimamente, la mesa de enlace se ha pronunciado en reclamo a esto. ¿Cuál es tu posición respecto a esta situación en particular, y también sobre la inflación?[/b] El sector agropecuario se ha visto enormemente beneficiado por este proyecto económico. Basta con observar sus ganancias y cómo se vive en las zonas donde la soja prevalece. En cuanto a la inflación, independientemente de la discusión acerca de cuál es su número, se trata de encararla pero sin las recetas ortodoxas del monetarismo. Justamente, creo que la clave está en indagar en las cadenas de valor y notar quién se está llevando el dinero. [b]-La explotación de Vaca Muerta es una gran oportunidad para nuestro país. ¿Que pensas sobre estos métodos no convencionales de explotación de los recursos energéticos, ya sea petróleo o gas (fracking)? Siendo que han causado grandes desastres en otros lugares del mundo (EEUU).[/b] Es una cuestión técnica que me excede pero hay que encontrar un equilibrio. Esto significa que no se puede renunciar irracionalmente a las políticas extractivistas (lo cual no quiere decir que debamos aceptar sin más la destrucción medioambiental). Nuestro país tiene zonas ricas en minerales y, en particular, hay zonas que dependen casi exclusivamente de su extracción pero no se puede permitir que las empresas extranjeras que llegan a nuestro país paguen impuestos irrisorios, brinden pocas posibilidades de empleos de jerarquía para los trabajadores de la zona y no inviertan lo suficiente en encontrar una metodología de extracción que sea lo menos dañina posible para el medio ambiente. Creo que es posible hallar ese equilibrio. [b]-Las grandes corporaciones se caracterizan e imponen a sus recursos humanos planificar a largo plazo. ¿No ves una falencia de los distintos Gobiernos de los países, y del nuestro en el Nacional, Provincial, Municipal, en este aspecto de la planificación a largo plazo? Considerando que, por ejemplo: a este nivel de crecimiento mundial, quedan reservas de petróleo convencional para 20 años y si se logra explotar por métodos no convencionales se podría llegar a 30 años; y que todavía no se ha hallado una energía alternativa para satisfacer todas las necesidades energéticas que el mundo (y nuestro país) industrial de hoy requiere.[/b] Hay que evaluar las áreas. Por ejemplo, en Ciencia y Tecnología no podría explicarse el regreso de 1000 científicos si no fuera porque observan que existe, por parte del gobierno nacional, una política de largo plazo. Si así no fuera, se quedarían en los países del primer mundo que les dieron acogida cuando las políticas de décadas anteriores en la Argentina los expulsaban. En el área energética la sensación que tengo es que se han acelerado los tiempos. En un primer momento, el gobierno creyó que una burguesía nacional iba a poder resolver el vaciamiento al que nos exponía en capital extranjero. A esto sumale un crecimiento del 100% del PBI, el aumento del petróleo, etc., que generó un agujero importante y una enorme salida de dólares. La capacidad energética del país aumentó un 50% pero no alcanza. Por eso se toma la decisión de nacionalizar YPF, decisión cuyos frutos se verán en varios años. En cuanto al tema de energías alternativas, nuevamente, no soy un técnico pero entiendo que no es tan simple pues sería maravilloso reemplazar toda la energía contaminante con energía eólica o solar pero aun los que propician ese tipo de salidas reconocen que estas alternativas sólo pueden aportar un porcentaje menor de lo que necesita un país que crece al ritmo que crece la Argentina.