Un basavilbasense contó la experiencia de vivir el alerta de ts

El basavilbasense Gabriel Zabal contó que la evacuación fue muy rápida: “me ubicaron con el personal del Parque que vive dentro de las instalaciones. Rápidamente tenían listas unas camionetas para llevarnos a la parte alta de la isla, donde estaríamos a salvo de cualquier cosa que pasara en la costa”. El cineasta explicó que en todo momento estuvo bien, aunque admitió que se autoconvenció de que, a pesar de la alerta, no habría sobresaltos: “es lo normal; estás en un país que no es el tuyo, viviendo un fenómeno natural que no ocurre en tu tierra de origen, es natural sentir temor”. Zabal destacó que su mayor preocupación era cómo reaccionaría su familia en Entre Ríos cuando se enterara. “Por eso le pedí a una amiga de mi madre que se comunicara con ellos para hacerles saber que estaba bien, hasta que yo mismo pudiera establecer contacto, cosa que ocurrió más tarde cuando vía whats app pude hablar con mis padres”. En la estrategia de evacuación, el cineasta basavilbaense detalló que “la gente comenzó a movilizarse muy rápido, apenas se conoció la emergencia. La policía cortó -de manera precautoria- el camino a la parte alta, mientras nos evacuaban con la gente de la Fundación Charles Darwin a fincas o al poblado rural de Bellavista, a eso de las 20:35 hora de Ecuador (23:35 de Argentina)”. Este miércoles a la madrugada, “la alerta bajó a naranja y la marea estaba baja, según nos dijeron los marinos, quienes nos hicieron saber que la ola más grande llegaría a la madrugada”. Además, precisó que “a eso de las dos hora de Ecuador, la gente comenzó a regresar a sus hogares, porque se informó oficialmente que el peligro había cesado. Alcancé a tomar algunas fotografías de las personas retornando a sus casas, a pie o en bicicletas, porque más que eso no se podía hacer. Afortunadamente, fue un susto que nos mantuvo alertas, pero por suerte, no pasó a mayores”. El cineasta explicó que primero se enteró de la situación en la calle, por comentarios: “volví al parque y me dijeron: ‘tenemos una hora para evacuar, tenés que juntar tus cosas’. Sonaron las alarmas de la ciudad, mientras la policía advertía que no era un simulacro. Ahí mismo, la gente fue por los caminos de evacuación, luego se cortó la luz por precaución, pero todo en un proceso que se dio naturalmente”. Zabal agregó que “en el mes de noviembre hubo un simulacro para enseñar a la población cómo evacuar en casos como el del martes. La gente de la ciudad que no fue a la parte alta, sino al Coliseo cerrado de Deportes Santa Cruz y el estadio Pampas Coloradas”. “Me pregunté en un momento: ¿qué juntar para llevar? En Basavilbaso, ni ríos tenemos. El documento, el pasaporte, ropa, pero: ¿cuánta y para qué? Cuando vi que la gente salía de sus casas solo con un mochila y sus hijos de la mano, entendí cuan materialistas somos a veces. Entonces te das cuentas que experiencias como ésta te hacen crecer como persona. En definitiva, eso es lo que vale”, reflexionó. Fuente: AIM.