Argentina-Alemania la Final en números

Tanto alemanes como argentinos llegan a su tercer cara a cara en una final después de un campeonato casi perfecto, habiendo sólo empatado un partido cada uno y sin derrotas: España ganó en 2010 habiendo perdido el primer partido. Después de pasar por encima de Brasil como una apisonadora en semifinales, los alemanes confían en que tienen las de ganar ante Argentina. Será su octava final, un récord, para igualar a Italia con cuatro mundiales y quedar a uno de los pentacampeones locales. La Albiceleste, por su parte, llega con la moral por las nubes, con su hinchada virtualmente tomando Río de Janeiro y con la confianza en que todo lo puede el liderazgo de Javier Mascherano. Sin olvidar, claro, que con ellos juega "Lio" Messi. La Albiceleste llega a la final con ganas de revancha después de haber sido eliminada por Alemania tanto en el Mundial que los germanos organizaron en 2006 como en Sudáfrica 2010. Ningún otro equipo ha sido derrotado tres veces seguidas por el mismo rival. No obstante, la final de 1986 es la única victoria de los sudamericanos en los seis enfrentamientos que han tenido en mundiales. Dos se han resuelto con empate (uno de ellos los cuartos de final de 2006, que fueron a los penaltis) y Alemania ha ganado tres. Es más, el 4-0 con el que se impuso Alemania en los cuartos de final de Sudáfrica es la derrota más abultada que ha sufrido Argentina en un Mundial. Alemania ha marcado nada menos que 17 goles en seis partidos, lo que hace un promedio de cerca de tres por encuentro (2,8). Y aunque esa media se ve engordada por el antológico 7-1 que le endosó a Brasil en la semifinal, ya antes del encuentro presentaba un promedio de dos, casi el doble que su rival de este domingo, que ha hecho siete en sus seis partidos (1,16). Los argentinos se encomiendan a que Messi, que lleva cuatro goles. No anotó en los últimos tres partidos y el 10 no ha pasado cuatro partidos sin marcar desde que Sabella se hizo cargo del equipo en 2011. La esperanza alemana en el plano individual es Thomas Müller, quien ha hecho cinco goles en seis partidos. Los germanos sólo disputaron una prórroga, contra Argelia en octavos de final, para hacer un total de 570 minutos. Argentina, por su parte, ha tenido que acudir al tiemplo suplementario tanto en la semifinal contra Holanda como antes en los octavos contra Suiza, resuelta por el gol de Di María. Habiendo jugado media hora más, se supone que los argentinos deberían llegar más cansados, pero los alemanes han corrido poco más de dos kilómetros más y han usado menos jugadores (18 contra 20). De los que acuden a la final, el que más kilómetros ha recorrido es Müller. La estrella del Bayern Múnich corrió 68,8 kilómetros (en 562 minutos), medio kilómetro más que su compañero Toni Kroos (en 570 minutos). Por detrás de los 67,3 kilómetros de Philipp Lahm aparece el primer argentino, Mascherano con 67,2 kilómetros en 600 minutos. Aunque ambos conjuntos presentan un 80% de efectividad en el pase según la FIFA, los alemanes han completado casi 500 más que Argentina. Sin embargo, el rey del pase en el Mundial es Javier Mascherano, que ha hecho 478 con un impresionante 86,6% de efectividad, es decir, ha fallado sólo 74. Fuente: BBC.