Allanaron escribanía con la que trabajaba Lázaro Báez

Por más de nueve horas se prolongó el operativo en la Escribanía de Leandro Albornóz, en calle Zapiola al 200 de Río Gallegos. Anoche, a las 23:40, y después de más de seis horas de estar en aprestos, esperando la orden judicial, los gendarmes lograron entrar a las oficinas con los funcionarios judiciales para iniciar el allanamiento de práctica. Pasadas las 8:30 de este domingo abandonaron el domicilio e hizo lo propio el escribano Albornoz, quien no esquivó a los micrófonos y reconoció sentirse incómodo ante la situación que le toca vivir por el trabajo profesional que hace, afirmó trabajar para Báez desde el 2004, pero negó tener vinculación comercial, más allá de la profesional con el empresario K hoy detenido. Sobre esa detención dijo que nadie es culpable hasta que la justicia lo demuestre y sostuvo que “vive normalmente”, tratando de desaletar cualquier especulación sobre riquezas y relaciones con el lavado de dinero que se investiga. Sin embargo, el escribano, tiene una larga y fuerte vinculación con Lázaro Báez y la familia Kirchner, ha sido la persona que conformaba la empresa Valle Mitre y algunos en esta capital lo apodaban “el empleado de Lázaro”, por las acciones que realizaba ante los pedidos del constructor. Todos recordamos la orden que le dio Báez a Albornóz cuando decidió quitarle todos los poderes conferidos al excontador de Austral Construcciones, Fernando Butti, cuando descubrió que éste se había quedado con buena parte de un negocio inmobiliario. Todo aquel trámite, fue preparado en las oficinas de Albornoz y fue el propio escribano el encargado de comunicárselo a Butti, cuando Lázaro lo mandó a llamar de urgencia para revocarle los poderes. Fuente: Agencia OPI Santa Cruz.