Domingo 5 de Abril de 2009, 15:50

Apareció un mosquito más resistente

| Es una variante del que ahora transmite la enfermedad. Se encuentra en zonas selváticas de Misiones y se puede trasladar a las ciudades. Resiste las bajas temperaturas y es muy díficil de combatir. Reclaman más prevención.

Lo llaman el “tigre asiático” porque hizo estragos en las epidemias de dengue y fiebre amarilla registradas en Asia. Es mucho más fuerte y peligroso que su primo hermano, el Aedes aegipty, porque resiste temperaturas más bajas y puede trasladarse de zonas urbanas a rurales sin inconvenientes. Desde el año pasado se encuentra en las zonas selváticas de Misiones. Y amenaza con desplazarse hacia las ciudades. Especialistas y funcionarios advierten que la situación puede complicarse si no se toman las medidas preventivas correspondientes. Su nombre: Aedes albopictus, un supermosquito que amenaza con transformarse en una nueva pesadilla para las autoridades sanitarias. “Estamos en presencia de otro vector mucho más duro, resistente y versátil que el Aedes aegipty, si no lo controlamos debidamente vamos a tener problemas serios”, aseguró Claudio Zin, ministro de Salud bonaerense, a Crítica de la Argentina. “Pica cualquier cosa que tenga sangre, puede vivir tanto en el campo como en la ciudad y soportar temperaturas de hasta 12 grados, lo que lo transforma en un insecto muy difícil de combatir”, agregó el funcionario. Si bien Zin aclaró que no se encontraron especímenes en la provincia de Buenos Aires, advirtió: “No esperemos a que nos sorprenda y comienza a expandirse por todo el territorio nacional sin tomar las medidas correspondientes”. Según el director de epidemiología provincial Mario Masana Wilson, “este mosquito puede transmitir más enfermedades que el Aegypty, por ejemplo la fiebre amarilla y ya fue identificado el año pasado en las zonas periurbanas de Puerto Iguazú”. El experto aclaró que “la provincia de Buenos Aires realiza vigilancia entomológica activa para detectar qué tipo de mosquitos se encuentran en el territorio, porque si está el vector transmisor, claramente puede aparecer la enfermedad”. Desde la cartera sanitaria nacional minimizaron el señalamiento sobre la presencia de este vector, hasta ahora nunca mencionado por los funcionarios. El director nacional de Prevención de Enfermedades de Riesgo, Hugo Fernández, aseguró que “sólo existen algunas especies ubicadas en la provincia de Misiones, pero no tenemos comprobado que hayan aparecido Albopictus como vectores transmisores de dengue ni en éste ni en ninguno de los brotes anteriores de la enfermedad”. El jefe del Departamento de Zoonosis del hospital Muñiz, Alfredo Seijo, aseguró que “si consideramos la facilidad y rapidez de transporte actual y los antecedentes históricos, sumados a la constante presencia del Aegipty en todo el territorio argentino y la introducción de Albopictus en la zona del NEA, se podrá comprender la magnitud del riesgo, que dista mucho de ser exagerada”. Para la doctora Lilián Corra, presidenta de la Asociación Argentina de Médicos para el Medio Ambiente, “los casos de fiebre amarilla y dengue son indicios de la migración de mosquitos y del impacto que están teniendo en la Argentina factores como los cambios en temperatura y en regímenes de lluvias”. Si bien durante el fin de semana no se comunican resultados de las pruebas serológicas, el ministro Zin aseguró que en la provincia “hay 29 casos de dengue confirmados y 68 sospechosos”. Autoridades sanitarias de Salta desmintieron que en la provincia haya más de 5.000 infectados y afirmaron que se trata de 1.258 pacientes con resultados positivos y otros 1.834 en estudio. Desde que comenzó 2009 se reportaron en todo el territorio nacional 6.020 casos de dengue autóctono, 501 importados y 3 hemorrágicos. Fuente: Mauro Federico.