Jueves 23 de Febrero de 2006, 10:37

Aprobaron la modificación del Consejo de la Magistratura

DESPUES DE OCHO HORAS DE | Los legisladores de la Cámara Baja votaron la ley que propone reducir de 20 a 13 los miembros del organismo y establece, entre otras modificaciones, cambios en el Jury de Enjuiciamiento. Kirchner había pedido a los diputados que "avancen y sancionen". Sobre el final del debate hubo acusaciones, criticas y confesiones.

El gobierno del presidente Néstor Kirchner consiguió anoche un resonante triunfo parlamentario y político en la cámara baja, al obtener la sanción de la ley que modifica la composición del Consejo de la Magistratura por 148 votos a favor contra 89 en contra y dos abstenciones. Tras un prolongado debate que se inició poco antes de las 15, el bloque de diputados del Frente para la Victoria consiguió superar holgadamente los 129 votos exigidos para modificar al organismo judicial que selecciona y remueve a los jueces. El bloque kirchnerista saludó alborozado -con una prolongada salva de aplausos- la sanción de la ley que se produjo después ocho horas y media de debate y de dos meses de espera desde que obtuvo la sanción en el Senado. Alrededor de cuarenta oradores de la oposición cuestionaron la reforma del Consejo de la Magistratura por entender que aumenta el poder del oficialismo sobre la justicia. El presidente del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, y el presidente del cuerpo, Alberto Balestrini, se comunicaron varias veces con la Casa de Gobierno para informar sobre la marcha de la sesión, que siempre se mantuvo dentro de los carriles normales. El oficialismo empujó la sanción del proyecto que había sido votado en diciembre en el Senado, con el argumento de conformar un organismo menos burocrático y más eficiente. Pero el arco político representado en la Cámara de Diputados de izquierda a derecha, cuestionó la modificación que reduce el peso de la oposición, por entender que se otorga al gobierno un riesgoso poder de veto con respecto a la designación y remoción de los magistrados. Los radicales, los centroderechistas de Pro, los centroizquierdistas de ARI, los socialistas, un sector del duhaldismo y otro del menemismo, cuestionaron con encendidos discursos la reforma del instituto incorporado a la Constitución Nacional en Santa Fe, en 1994. Pero el oficialismo logró sumar a 103 votos propios -no votaron a favor ni Rafael Bielsa ni el neuquino Oscar Massei- 45 voluntades que le permitieron superar con holgura la mayoría absoluta. De esa treintena adicional a los votos kirchneristas, unos 15 fueron aportados por ex duhaldistas y menemistas de la bancada Peromismo Federal, que conduce el bonaerense José María Diaz Bancalari. La bancada peronista disidente se exhibió partida en dos bandos, ya que otra docena de ex menemistas y ex duhaldistas votaron junto a los radicales, los macristas, los socialistas y los legisladores del Ari, que conduce Elisa Carrió. El debate por el Consejo de la Magistratura fue sin duda el mayor combate parlamentario que el gobierno nacional libró en la Cámara de Diputados desde la llegada de Néstor Kirchner a la Casa Rosada. Los líderes de la oposición se juntaron el 27 de diciembre pasado pese a sus distintos orígenes ideológicos, para resistir la reforma del Consejo de la Magistratura que disminuye la presencia de legisladores no oficialistas. Pero el oficialismo que no tiene quorum propio en la Cámara de Diputados como en cambio lo posee en el Senado, consiguió sumar los votos necesarios para obtener la sanción del proyecto que fue impulsado en la cámara alta por la senadora Cristina Ferández de Kirchner. Los diputados que integran la conducción del bloque kirchnerista juzgaron anoche que la sanción de la ley que reforma el Consejo de la Magistratura se convirtió en un exigente test para el futuro, ya que permite medir la capacidad negociadora del oficialismo para conseguir sancionar en el futuro otras leyes que tengan igualmente una fuerte oposición. Como dato adicional, el debate por el Consejo de la Magistratura provocó una fractura entre los ex duhaldistas a los que la situación obligó a alinearse a favor o en contra del gobierno.