Jueves 6 de Septiembre de 2007, 10:52

ATENTARON CONTRA DIRECTIVO DE NESTLÉ

| Luego de abrir un "libro explosivo" sufrió importantes quemaduras en el rostro, el pecho y las dos manos. También provocó daños en la oficina. El herido, sin embargo, no era el destinatario original del sobre que contenía el libro.

Un directivo de la empresa Nestlé resultó gravemente herido en una mano y sufrió quemaduras cuando abrió un libro explosivo que llegó en un sobre a la sede central de la empresa, ubicada en la localidad bonaerense de Vicente López, informaron fuentes policiales y judiciales. El episodio se produjo a las 11 en el primer piso de la firma, ubicada en la avenida Del Libertador 1.855, y la víctima fue un gerente del área de informática, identificado como Cosme Venecialle, de 47 años. Las fuentes explicaron que Venecialle no era el destinatario original de la correspondencia, pero ayer cuando abrió el libro que había quedado sobre su escritorio, se produjo la explosión que le causó importantes quemaduras en el rostro, el pecho y las dos manos y daños en la oficina. Además, los médicos trataban en la tarde de ayer de reconstruirle con cirugía la primera falange de uno de sus dedos que quedó desprendida y sólo sujetada por colgajos, según precisaron las fuentes. Fuentes de la investigación revelaron a la agencia Télam que el “libro-bomba” fue llevado a la empresa el martes por un motoquero, dentro de un sobre blanco con una inscripción de la Oxford University y el nombre del ejecutivo destinatario. Según lo que pudieron reconstruir los investigadores, el empresario destinatario abrió el martes el sobre y al ver el libro, que venía envuelto con un papel celofán transparente, lo dejó sobre el escritorio de Venecialle. Con los trozos de papel que quedaron desparramados, los pesquisas vieron que aparentemente el libro era sobre la pobreza en países de América Central, explicó uno de los investigadores. Justamente ayer Venecialle encontró el libro, lo abrió y se produjo la explosión en la que terminó lesionado. Los investigadores dijeron que el ejecutivo herido salvó milagrosamente su vida, ya que la bomba también dejó un agujero en el escritorio, rompió una silla, hizo desprender alguna placas del techo y dejó grandes manchas de pólvora en las paredes. Los peritos comprobaron que el dispositivo explosivo estaba armado con pólvora, una fuente de energía y cables y tras verificar que no había peligro para los empleados, el edificio fue habilitado nuevamente para trabajar a las 16.