Bergoglio denunció la existencia de eutanasia encubierta
| "En la Argentina hay eutanasia encubierta. Las obras sociales pagan hasta cierto límite; si te pasás, ´morite, total sos viejo´. Hoy se descarta a los viejos cuando, en realidad, son la sede de la sabiduría del pueblo", enfatizó Bergoglio.
El arzobispo porteño y presidente del Episcopado argentino, cardenal Jorge Bergoglio, denunció que en la Argentina "se aplica la pena de muerte" mediante el aborto y la "eutanasia encubierta" de ancianos, que sufren abandono y maltrato.
El prelado dijo que esos hechos se registran en el contexto de una "cultura del descarte", al tiempo que sostuvo que se "explota y prostituye" a miles de niños.
Bergoglio se expresó así al presentar el "Documento de Aparecida", producido por los obispos latinoamericanos reunidos en esa ciudad de Brasil en mayo pasado.
Ante sacerdotes, religiosas y laicos, Bergoglio dijo que "la palabra más mencionada en el documento de Aparecida es ´vida´, porque la Iglesia es muy consciente de que lo más barato, lo que menos se cotiza en América latina, es la vida".
Bergoglio denunció la vigencia de una "cultura del descarte de todo lo que no sea funcional", en particular niños o ancianos.
Esta cultura, dijo, es como una "nueva ilustración" que se expresa en un "progresismo histórico, sin raíces" y en un "terrorismo demográfico".
"A los chicos se los maltrata; no se los educa ni alimenta. Muchos son prostituidos y explotados", dijo.
Además, puntualizó que "esto pasa acá, en Buenos Aires, en la gran ciudad del Sur".
"En algunos hoteles de cinco estrellas se ofrece prostitución infantil: figura en el menú de entretenimientos, bajo el título de ´Otros´", afirmó.
Bergoglio denunció que "sobre la calle Amancio Alcorta, entre Pompeya y la Villa 21, en cualquier horario hay nenas de entre 11, 12 o 13 años ofreciéndose" para mantener sexo.
"Y después corren con ese dinero a comprar paco. Esas chicas y chicos procrean niños neurológicamente enfermos. Son de descarte", indicó.
Además, advirtió: "Decimos que no estamos de acuerdo con la pena de muerte, que es una injusticia, pero en la Argentina tenemos pena de muerte".
"Puede ser condenado a muerte un niño concebido por violación de una mujer de mente idiota. Seamos conscientes de que con eufemismos no podemos tapar la cultura del descarte", dijo.
Fuente: NA.
