| Juan Carlos Blumberg llevó ayer su petitorio con propuestas contra la inseguridad a la Casa Rosada y al Congreso Nacional, aunque no fue recibido por ningún funcionario importante del oficialismo.
Blumberg intentó reunirse con el ministro del Interior Aníbal Fernández y el vicepresidente Daniel Scioli, pero no pudo entregarles sus iniciativas en mano.
El ingeniero se acercó a la Casa de Gobierno alrededor de las 15:30, pero le dijeron que el titular de la cartera política no se encontraba y debió entregar su petitorio al secretario privado del ministro, Diego González.
Voceros oficiales señalaron que ministro estaba ausente, en tanto que testigos del hecho indicaron que González recibió la carpeta en el exterior de la Casa Rosada.
Posteriormente, Blumberg se dirigió al Senado de la Nación también con la intención de presentar sus propuestas, aunque esta vez ante el vicepresidente, Daniel Scioli.
Sin embargo, el funcionario tampoco se encontraba en el edificio, -según se informó oficialmente- por lo que personal del Parlamento le informó que debía entregar su petitorio en mesa de entradas, en Solís 125.
Ante esta respuesta, Blumberg tomó sus carpetas y se retiró del Congreso sin efectuar declaraciones a la prensa.
El jueves, al hablar ante una multitud en la Plaza de Mayo, el ingeniero había señalado que ni el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, ni Aníbal Fernández, habían atendido sus llamados -destinados a entregar su petitorio- y que sólo lo había hecho Scioli, aunque sin poder facilitarle el objetivo.
Este viernes, Blumberg anticipó que por la tarde iría a la Casa Rosada para ver si podía ser "atendido" por algún alto funcionario público, algo que finalmente no consiguió.
En otro orden, destacó que la marcha que lideró en la Plaza de Mayo pudo sobreponerse a los "contratiempos" y a las "trabas" que -según dijo- le "pusieron".
Blumberg señaló que en la movilización que encabezó primó el "cariño" y se diferenció de la que lideró Luis D’Elía al Obelisco porque "a nadie se le pagó los micros".
Sobre el subsecretario de Tierras para el Hábitat Social, dijo que el hecho de que trabaje para el Estado le hace "mal" al país y relató que cuando concurre a embajadas de "prestigiosos países
importantes del mundo" le preguntan por qué "alguien que tomó una comisaría" es funcionario.
En tanto, el ingeniero reiteró que no "analizó" la posibilidad de aceptar una candidatura política en las elecciones del año próximo y repitió que no decidió movilizarse contra el Gobierno, sino porque "cuando el gobierno quiere cosas, las consigue".
Blumberg recordó que cuando encabezó su primera marcha, hace "dos años y cuatro meses", los funcionarios oficialistas "habían prometido" medidas que luego no se implementaron.
Fuente: NA.
