| La denuncia sobre su presunta vinculación con una imprenta que realiza trabajos para el Estado persigue a Amado Boudou, pero el Vicepresidente sigue sin replicar la acusación de manera oficial. Mientras tanto, desde el Congreso nacional la oposición le pide al Gobierno que informe sobre la situación.
El Presidente del bloque de diputados de la Unión Cívica Radical (UCR), Ricardo Gil Lavedra, precisó que el pedido de informe fue presentado el viernes último y el Gobierno tendrá diez días hábiles para brindar la información. "Si no nos entregan la información, que es pública, vamos a interponer una acción de amparo para obtenerla", dijo el legislador.
El pedido fue cursado al Banco Central de la República Argentina, presidido por Mercedes Marcó del Pont, y a la Administración Federal de Ingresos Públicos, que preside Ricardo Echegaray. Boudou es investigado por la Justicia porque estaría implicado en la adjudicación del Banco Central para la impresión de billetes a un empresario amigo.
Gil Lavedra dijo que es "inusual" que el fiscal haya emprendido esta "investigación preliminar" antes de analizar directamente qué tipo de conexiones tiene Boudou respecto de lo denunciado. "El vicepresidente de la República no puede tener una denuncia tan grave en su contra y no decir nada. Por lo menos, debe decir que no tiene nada que ver. Esto roza lo más alto del poder", dijo el Diputado.
El Diputado radical dijo que en el país "hay mucha tolerancia pública" contra las denuncias por casos de corrupción en los Gobiernos o en los que están implicados los funcionarios. "En la década menemista se denunciaron hechos terribles y la gente votó el segundo mandato. Pero cuando perdió el consenso público, pasó a ser el Gobierno más corrupto del mundo", sostuvo.
El Gerente General del Banco Central, Benigno Vélez, renunció a su cargo en medio de la polémica por la presunta contratación de una empresa cercana al vicepresidente para la impresión de billetes de cien pesos. El funcionario acercó en las últimas horas del viernes pasado su renuncia de puño y letra a la titular de la autoridad monetaria, Mercedes Marcó del Pont, aunque la dimisión será oficializada recién mañana, tras los feriados del Carnaval.
Según pudo saber Noticias Argentinas, para reemplazar al renunciante Vélez la Presidente del BCRA habría pensado en el economista Matías Kulfas. Vélez, un estrecho colaborador de Boudou, habría sido quien dio el aval técnico para que la firma que estaría ligada al vicepresidente imprima 600 millones de billetes, con un contrato de 50 millones de dólares.
La firma en cuestión es Compañía de Valores Sudamericana (ex Ciccone Calcográfica), presidida por Alejandro Vanderbroele, amigo personal de Boudou. Vanderbroele es un monotributista que encabeza la firma que aportó el dinero necesario para la quiebra de Ciccone Calcográfica, la mayor imprenta del país. El escándalo en el que se ve ligado el Vicepresidente de la Nación fue el argumento necesario de Marcó del Pont para pedirle la renuncia a Vélez, quien estaba desde hace meses en medio de la interna de la titular del BCRA y el segundo del Poder Ejecutivo nacional.
Ahora, Vélez sería reemplazado por Kulfas, un hombre de máxima confianza para Marcó del Pont y quien hasta la semana pasada se desempeñaba como director del Banco Nación, con un perfil moderado.
Con la salida de Vélez, Boudou perderá uno de sus hombres en el Banco Central, aunque por ahora le quedará otro de los directores, Sergio Chodos, quien fue denunciado penalmente en marzo de 2011 por el presidente de la Asociación Civil Anticorrupción y abogado porteño Ricardo Monner Sans. Este abogado acusó a Chodos por una modificación en las normas cambiarias con efecto retroactivo que habría estado destinada a beneficiar a empresarios amigos, según la denuncia.
Fuente: NA.
