Sábado 3 de Marzo de 2007, 16:12

Buscan detener el avance de los "pools" de arrendamientos

| Lo que se pretende con la iniciativa es quitar los incentivos que favorecen los contratos cortos que se otorgan a productores pasajeros que entran y salen rápidamente del negocio, a través de la aplicación de mayores gravámenes impositivos.

Federación Agraria Argentina presentará en el Congreso un proyecto de ley sobre arrendamientos, con el fin de que, desde el Estado, se establezca un nuevo sistema de plazos que amplíe los contratos por el uso de la tierra y favorezca ese tipo de alquileres a productores locales, en lugar de financieras y "pools" empresarios. El tema había sido conversado durante las reuniones que las cuatro entidades más relevantes del campo mantuvieron con el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, aunque su discusión quedó postergada por estar dentro de los temas más urgentes para el agro. Actualmente, el sistema de arrendamiento de tierras permite que cualquier persona pueda alquilar un campo para trabajarlo durante un año o una cosecha, y siembre en él lo que quiera, sea un productor regional, una empresa, una financiera o fideicomisos. Según datos de la Federación Agraria, el 60 por ciento de las 30 millones de hectáreas cultivables del país es utilizada por quienes no son dueños de ellas. "El problema es que a estos fondos les importa un carajo lo que quede en el suelo y se van sin reponer los minerales de la tierra", criticó Buzzi, a la vez que precisó según los datos que maneja, ese proceso de mantenimiento fértil "apenas se cumple en un 30 por ciento". Aún así, el modelo permitió récords de cosecha registrados en los últimos años, cuya cúspide llegó en 2006 con casi 100 millones de toneladas producidas. En diálogo con la agencia NA, Buzzi dijo que "este modelo es exitoso en términos productivos, pero es posible sostenerlo ampliando la cantidad de productores y poniéndolo en manos de los locales". El proyecto propone que uno de los frenos para que esta situación continúe sería aumentar la estabilidad contractual por cinco años, en vez de hacerlo cosecha por cosecha o año por año. Otro punto de la propuesta es que el Gobierno promueva contratos que de entrada mejoren las posibilidades a productores locales y regionales, en vez de inversores pasajeros. Y el último es implementar un mecanismo impositivo de mayores gravámenes para los arrendatarios temporales y otro de reducción de costos para los locales. La cuestión de fondo "es tratar de que no se consoliden los monocultivos ni se destruya el medioambiente y que la industria agraria se sostenga con más cantidad de productores, y no en pocas manos pasajeras", concluyó el dirigente. El proyecto elaborado por la Comisión de Contratos Agrarios de la entidad será presentado el próximo martes a las 10 en el auditorio del edificio anexo de la Cámara de Diputados.