Martes 27 de Agosto, 23:59

Caputo confirmó que desde septiembre baja 10 puntos el impuesto PAÍS

Política y Economía | El Ministro de Economía, Luis Caputo, anunció este martes por la noche una reducción del Impuesto PAÍS que entrará en vigor desde el próximo lunes, 2 de septiembre. La alícuota para la importación de bienes y fletes se ajustará del 17,5% al 7,5%, lo que representa una disminución de 10 puntos porcentuales.


El anuncio fue realizado a través de la red social X, donde Caputo escribió: “Importante! A partir del lunes 2 de septiembre la alícuota del Impuesto PAÍS para la importación de bienes y fletes se retrotraerá del 17,5% al 7,5%. Prometimos y cumplimos!”.

Esta medida es una de las promesas clave del gobierno de Javier Milei, quien había prometido reducir el impuesto para mitigar su impacto en la inflación y estimular la economía.

Caputo había anticipado la reducción en varias ocasiones, subrayando el impacto positivo que tendría en la inflación y en el costo de los bienes importados.

La medida no se extiende, sin embargo, a otros sectores como los paquetes turísticos y la compra de dólares ahorro, que permanecerán sujetos a la tasa anterior.

Esta decisión deja a estos segmentos fuera del alcance de la reciente reducción impositiva, enfocando el alivio en el comercio de bienes y el transporte internacional.

Caputo había señalado previamente que la reducción del impuesto PAÍS es crucial para contrarrestar los efectos negativos que, según él, este tributo ha tenido sobre la economía. En sus declaraciones, el ministro subrayó: “En septiembre lo bajamos al 7,5%. Eso va a tener un impacto en inflación clarísimo. El oficial se mantendrá igual. El impuesto PAÍS es muy dañino”.

Con esta medida, el gobierno busca retornar a la tasa impositiva vigente en diciembre de 2023, cuando Javier Milei asumió la presidencia.

La reducción se enmarca en un esfuerzo más amplio por parte de la administración actual para impulsar la economía y mejorar las condiciones para el comercio exterior. 

La medida ha sido recibida con expectativas positivas por los sectores afectados, que anticipan una mejora en sus costos operativos y una posible disminución en los precios de los bienes importados.

Sin embargo, se mantiene la incertidumbre sobre el impacto total que esta reducción tendrá en la inflación y en el equilibrio fiscal a largo plazo.