Jueves 16 de Junio de 2005, 12:17

CINCUENTA AÑOS DEL BOMBARDEO A PLAZA DE MAYO

| Se cumplen cincuenta años del bombardeo a la Plaza de Mayo, donde sectores opositores intentaron derrocar al gobierno democrático de Juan Domingo Perón mediante un levantamiento armado, causando un fuerte impacto emocional en la población debido a lo trágico de este acontecimiento que ocasionó cerca de 300 muertos y un millar de heridos.

Aquel jueves 16 de junio de 1955 aviones de la Armada y la Fuerza Aérea bombardearon los edificios gubernamentales ubicados frente a la Plaza de Mayo. Era la antesala de la caída del gobierno del Gral. Juan Domingo Perón, quien supo construir una Argentina justa, libre y soberana y puso al país como modelo de dignidad y desarrollo para todas las naciones de América. La primera bomba que cayó en el techo de la Casa Rosada habría sido la única capaz de ser justificada, pero la siguiente dio en un trolebús y mató a todos sus ocupantes, mientras la gente que estaba en la plaza corría con tanto desconcierto como desesperación. Poco tiempo después, durante una nueva incursión aérea, la plaza era un tendal de cadáveres y personas mutiladas. Al caer la tarde, los rebeldes quedaron cercados y otros huyeron al Uruguay. La Confederación General del Trabajo (CGT) convoca una concentración en la Plaza de Mayo y Perón anuncia que el intento golpista ha sido sofocado e insta a sus partidarios a que estén tranqu ilos, exhortando a evitar actos de violencia. Con la pretensión de eliminar todo vestigio de peronismo como si éste no hubiese sido lo suficientemente importante como para modificar la misma estructura socio-política argentina, seguirán con la persecución en los fusilamientos del Gral. Juan José Valle y los compañeros de José León Suárez y se desplegó durante años contra la resistencia y la proscripción peronista, culminando con los miles de muertos, torturados y desaparecidos durante el Proceso de Reorganización Nacional instaurado entre 1976 y 1.983, que ha dado identidad a nuestro movimiento. Las sociedades modernas se fortalecen y crecen con memoria y justicia, nunca con olvido e impunidad. No se puede olvidar el pasado trágico para entender el presente y prever el futuro. Al cumplirse un nuevo aniversario de estos hechos, la Corte Suprema de Justicia en un fallo ejemplar dictó la inconstitucionalidad de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, que significó el fin de la impunidad en nuestro país largamente castigado durante la última dictadura militar. Como dijera el ex Presidente Carlos Pellegrini hace casi un siglo: “Sólo habrá ley de olvido, sólo habrá ley de paz, sólo habremos restablecido la unión de la familia, el día en que todos los argentinos tengamos iguales derechos el día en que no se los coloque en la dolorosa alternativa o de renunciar a su calidad de ciudadanos o de apelar a las armas para reivindicar sus derechos despojados”. Opinión del Dr. Julio Aldaz, Diputado Partido Justicialista.