Viernes 6 de Mayo de 2005, 10:42

Compañías de energía vuelven a pedir aumentos

| Las principales conclusiones de un seminario desarrollado en el Centro Argentino de Ingenieros, que reunió a directivos de Repsol YPF, Total, Transportadora de Gas del Norte (TGN), Pluspetrol, CMS Energy y Transener y Cammesa.

Por el contrario, sus representantes creen que los problemas de escasez de gas y electricidad aumentarán en los próximos años, por lo que vuelven a pedir aumentos tarifarios y reglas de juego definidas. Una característica común de estos ejecutivos es que, a diferencia de empresarios de otros sectores, hablan sin eufemismos de la escasez: la llaman crisis energética. Aunque todos se cuidaron de hacer pronósticos para este invierno, describieron el escenario como incierto. Ese convencimiento llevó a Daniel Ridelener, gerente comercial de TGN, a comenzar su exposición con lo que juzgó una curiosidad: "Entre 1995 y 2000, en estos seminarios anunciábamos inversiones que siempre se concretaron. No había seminarios para saber qué ocurriría en los próximos 60 días y qué pasaría el invierno. Evidentemente, algo ha cambiado, y para mal", dijo. Todos coincidieron en la fragilidad del sistema energético. El francés Christopher Sassolas, gerente de Desarrollo de Negocios de Gas de Total, arrancó jugando con las palabras. "El país tiene gas para..., perdón, debería decir que el país tenía gas", dijo, subrayando "tenía". "A la Argentina ya le falta gas; la producción global del país no es suficiente para satisfacer la demanda", dijo, y cuestionó los valores: "Con un precio que está lejos de la variable económica, nadie va a seguir explorando y produciendo". El francés tampoco ve aquí demasiado horizonte para reemplazar el gas que no llegará, por los conflictos políticos, desde Bolivia. "No hay perspectivas para desarrollar yacimientos. Las probabilidades de encontrar nuevo gas en la Cuenca Austral son escasas. Lo que se supone que hay sería consumido en dos años. Esto nos pone en la situación de que no se encuentre mucho gas en el futuro en la Argentina. Aun si tuviéramos precios normales y sin impuestos distorsivos, no hay posibilidades geológicas de sostener este crecimiento de demanda". Nino Barone, gerente de Gas Natural de Pluspetrol, coincidió: "Es difícil que aparezcan nuevos yacimientos significativos como Loma La Lata". Sassolas cree, como la mayoría de los empresarios, que la salida estará en Bolivia y en la integración en un mercado regional. Ridelener también objetó las tarifas, que recordó que están congeladas desde julio de 1999. "La Argentina tiene precios que rayan lo ridículo y son parte del problema. Estamos ahondando una distorsión que nos está llevando a un problema serio de abastecimiento." Detalló varios productos que habían aumentado tras la devaluación, y concluyó: "Se nos discrimina y seguimos teniendo que soportar el congelamiento". Francisco Mezzadri, presidente de CMS, también vio dificultades y aludió al Gobierno, pero rescató a algunos miembros de Cammesa y la Secretaría de Energía: "Resulta muy difícil maximizar la generación sujeta a caprichos políticos. Sólo la capacidad de muchos de los que están en esos organismos permite que sigamos teniendo luz en la Argentina". Y agregó que el sector estaba sometido a una fuerte intervención estatal. "El año pasado hubo 1676 resoluciones de la Secretaría de Energía. Hay un subsidio indiscriminado a sectores, y es lo mismo ser pobre, rico o exportador." Silvio Resnich, presidente de Transener, fue, además del menos pesimista, el único que aventuró un cuadro para este invierno: "Si me preguntan qué va a pasar, contesto que no va a faltar energía, va a haber una energía más cara. La Capital Federal está muy bien defendida. Pero el problema puede estar en el interior del país. Sin orden, sin planes, sin gestión, es muy dificil llevar el país adelante".