Sábado 22 de Diciembre de 2007, 12:44

Condenan a cuatro de los acusados en la causa de las "narcovalija

| La Justicia condenó con penas de hasta ocho años de prisión a cuatro de los acusados por el caso de las "narcovalijas" de la empresa Southern Winds y absolvió al resto de los implicados.

El Tribunal Oral en lo Penal Económico 3 (TOPE3) dio una pena de cuatro años y seis meses de prisión a Walter Beltrame, ex encargado de la atención a pasajeros frecuentes de Southern Winds e hijo del ex jefe de la Policía Aeronáutica Alberto Beltrame, por ser coautor del delito de contrabando agravado. En tanto, los castigos más duros fueron para el ciudadano español José Ramón Villar, que recibió 8 años de prisión, y su esposa Elena Toimil Batán, que fue condenada a 7 años. Además, el Tribunal dio 5 años de prisión al colombiano Juan Aristizábal Tabares. Los españoles y el colombiano fueron considerados coautores de delito de "contrabando agravado de estupefacientes", con fines "inequívocos de comercialización. En cambio fueron absueltos los empleados de Southern Winds Claudio Baudino, Ariel Tamburrini (quien había sido procesado como "nexo" entre el proveedor de la droga y sus destinatarios) y Fernando Arriete. A la salida del edificio de tribunales, el abogado del matrimonio español, Gabriel Juricich consideró que el veredicto es "arbitrario" e implica una "condena política". "Realmente es una situación arbitraria, vamos a ver los fundamentos, consideramos que no existen, pero tenemos que esperar al 27 para rebatirlos. Esto es una condena política", sostuvo. Juricich agregó que "los españoles son la parte más débil de todo esto y por eso los condenaron", y sostuvo que son "chivos expiatorios de alguien que está ocultándose detrás de esta causa". Por otra parte, el TOPE 3 hizo lugar al pedido del fiscal Mariano Borinsky, enviar copias de las actuaciones a la Cámara en lo Penal Económico, para que se siga investigando la situación de Juan y Cristian Maggio y Enrique Montero, quienes eran las máximas autoridades de SW, cuando se registró el hecho, y no fueron juzgados en este juicio. También ordenó que se investigue la presunta comisión de falso testimonio de tres personas que declararon en la etapa inicial de instrucción, y el posible ilícito por parte del comodoro Alberto Beltrame, padre del único empleado de la compañía aérea que fue condenado este viernes. La lectura del veredicto estuvo a cargo de Jorge Pisarenco, presidente del TOPE 3, también integrado por Luis Imaz y Enrique Schlegel. Antes que concluyera la audiencia, celebrada en el subsuelo de Comodoro Py 2.002, de esta capital, Pisarenco notificó a las partes que los fundamentos del fallo se darán a conocer los el próximo jueves, a las 11:00, cuando comenzará a correr el plazo para eventuales recursos contra la sentencia. El hecho surgió el 17 de septiembre de 2004, cuando cuatro valijas que tenían membrete de la Embajada fueron enviadas desde Buenos Aires al aeropuerto de Barajas, en Madrid, en un vuelo de la empresa SW con 58,900 kilos de cocaína. Al mes, las autoridades de SW denunciaron el hecho ante la Justicia, y uno de los primeros detenidos fue Beltrame, hijo del entonces jefe de seguridad del Aeropuerto de Ezeiza. A raíz del caso, el presidente Néstor Kirchner relevó al jefe de la Fuerza Aérea, brigadier Carlos Rohde, y además se disolvió la Policía Aeronáutica Nacional (PAN), ahora reconvertida en la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).