| La presidenta Cristina Fernández de Kirchner recibió finalmente este miércoles a su vicepresidente, Julio Cobos, en una reunión "sin adjetivaciones ni a personas ni a conductas" y que se realizó "por respeto a las instituciones", según el lacónico informe oficial brindado por el jefe de Gabinete, Sergio Massa. En dos minutos, y sin admitir preguntas, Massa imitó el conocido estilo de su antecesor Alberto Fernández, que hizo una escuela de hablar sin decir nada.
"En ese marco de respeto era muy importante el respeto de la propia presidenta a su investidura y a la del vicepresidente", dijo Massa, quien como participante del encuentro fue el encargado de informar sobre la reunión.
En su escueta presentación, Massa -que compartió el estrado con el ministro del Interior, Florencio Randazzo, también asistente al encuentro- señaló que "fue una reunión sobria y seria, en la cual la presidenta y el vicepresidente hablaron de los temas que pasaron".
Fue ésta la única alusión, aunque de manera muy indirecta, a la razón por la cual Cristina Fernández y el mendocino se mantuvieron alejados durante las últimas semanas: la postura del vicepresidente frente al conflicto con el campo y su voto negativo en el Senado que determinó el fracaso del proyecto oficial de las retenciones al agro en la madrugada del jueves 17 de julio.
La última vez que ambos se habían visto frente a frente había sido el 7 de julio durante la cena de camaradería de las Fuerzas Armadas, donde fue muy notorio del frío trato de jefa del Estado hacia su vice. Luego del encuentro entre ambos, el gobierno buscó recomponer la imagen de ruptura entre la presidenta y el titular del Senado, que amenazaba con derivar en un alejamiento definitivo de los radicales K.
En ese sentido, en la Rosada se encargaron hoy de aclarar que "la Concertación Plural sigue vigente". A pesar del hermetismo sobre lo conversado porque "para el gobierno es muy importante el carácter reservado de la reunión", Massa pareció dejar entrever deslizó algunas frases que dejaron en claro que hubo momentos tensos.
"La presidenta fue muy profunda y muy sincera", señaló Massa, al tiempo que resaltó que la reunión se realizó por "el respeto a las instituciones que todos los argentinos esperan de su gobierno". Y agregó que "en ese marco de respeto era muy importante el respeto de la propia presidenta a su investidura y a la del vicepresidente".
En este sentido, y para dar una señal de que la Rosada no hará más comentarios al respecto, el jefe de Gabinete aclaró que "lo más importante es que cada uno en su rol institucional, la presidenta y el vicepresidente y todos los que somos parte de este gobierno vamos a seguir trabajando a favor de todos los argentinos".
Massa, quien temprano por la tarde había hecho el sorpresivo anuncio sobre el encuentro entre Cristina Fernández y su vice, explicó que anoche se había recibido la carta a través de la cual el mendocino pedía una audiencia. El encuentro entre ambos, que se prolongó durante 45 minutos, se llevó a cabo con tanto hermetismo que ni siquiera se permitió el ingreso de las cámaras para registrar la foto, como es habitual en cada audiencia presidencial.
El vicepresidente se retiró de la Casa de Gobierno sin formular declaraciones y se dirigió directamente al aeroparque metropolitano donde abordó un avión de la flota presidencial para dirigirse hacia Mendoza, donde asistió al sepelio de su consuegro.
Fuente: DyN.
