Miércoles 7 de Junio de 2006, 13:33

De la Rúa dice que hubo una operación política

SOBORNOS EN EL SENADO | El ex presidente De la Rúa apuntó contra los ex funcionarios del gobierno de la Alianza Carlos "Chacho" Álvarez y Rodolfo Terragno por entender que "indujeron a errores" en la causa que investiga el presunto pago de sobornos en el Senado.

"Álvarez salió a inculparme a mí, como una forma de justificar su renuncia. El día que declaró (Mario) Pontaquarto salen todos a la misma hora a hablar con los medios: (el entonces legislador porteño Alberto) Fernández y Alvarez. ¿Es o no es una cosa organizada?", se preguntó el ex presidente. De esta forma, De la Rúa insistió con su teoría de que la denuncia de pago de sobornos en el Senado respondió a un interés en "debilitar a la Alianza" y reiteró que el expediente judicial "se armó con mentiras", dichos y sospechas, pero no con pruebas. "El hecho no existió. No hay pruebas, y lo que hay demuestra que no ocurrió", remarcó el ex jefe de Estado del gobierno de la Alianza. En cuanto a Terragno, el ex presidente le endilgó haber "inducido a un error" a la justicia al haber señalado el "decreto de refuerzo presupuestario de la SIDE", que se sospechó podría haber favorecido el pago de sobornos. "Se tomaron como pruebas sucesos políticos, como las renuncias y los nombramientos", se quejó el ex jefe de Estado, convencido de que el arrepentido Mario Pontaquarto "fue ungido (en la causa) como un semidiós que puso y quitó honras". También dedicó una crítica sutil al entonces senador Antonio Cafiero, quien, a su entender, "estaba preocupado por su imagen" ante el alcance de la denuncia de pago de sobornos. Entre las figuras cuestionadas, el ex presidente incluyó además al sindicalista camionero Hugo Moyano por haber "creado violencia cuando iba a ser tratada la ley". "Todo viento y mentira, como dijo (Miguel de) Cervantes en el Quijote; así se fue construyendo todo esto, como una mentira", lamentó De la Rúa, en una conferencia de prensa que ofreció en sus oficinas del barrio porteño de Recoleta. Con todo, para De la Rúa la "extinción de la causa" queda en evidencia en el "entrecruzamiento telefónico" realizado por la justicia, que dejó implicados a cuatro senadores del total de 59 que votaron a favor de la reforma. "Los que se llamaron entre sí esa noche, son responsables; quiere decir que los que no llamaron no lo son. Esto es un absurdo porque hubo 51 votos indiscutidos y sólo se necesitaban 40 para aprobar la ley de Reforma Laboral", reflexionó. De la Rúa insistió con su convicción de que la causa se "armó con la idea de que hubo sobornos aún sin pruebas y sin saber quienes fueron los implicados" y consideró una "posición penosa" la de haber tenido que declarar ante un juez en carácter de ex presidente. El ex presidente negó ayer la realización de una reunión en su despacho en la Casa de Gobierno, donde presuntamente se habló del pago de sobornos a senadores para la aprobación de la ley de Reforma Laboral, tal como asegura el arrepentido Pontaquarto. En una extensísima declaración indagatoria que se inició a las 11.30 y que finalizó pasadas las 21, De la Rúa respondió unas 40 preguntas de Rafecas. Fuente: Télam.