Denuncian por quiebra fraudulenta a empresarios dueños de imprent

"Hubo una confusión de algunos porque cuándo se habla de terrorismo se habla de terrorismo económico. En este caso, la AFIP ha admitido la de delitos económicos y no la del financiamiento del terrorismo", recalcó. Vanoli expresó que ya se hizo una denuncia en el juzgado de Rafecas por la presunta quiebra fraudulenta y que la ley de delitos económicos penaliza los delitos de guante blanco. "El juez de garantizará que la empresa siga en marcha y los trabajadores sigan con trabajo", dijo en diálogo con FM Nacional Rock. "Creo que merece investigarse si esta repentina insolvencia y esta actitud de determinadas maniobras de materia contable y suba de divisas son de carácter fraudulenta. Es muy extraño que una empresa, salvo que tenga intenciones distintas a la de invertir, producir y ganar dinero, pase de una situación de cumplir toda sus obligaciones impositivas y rápidamente pase a un situación de insolvencia", denunció. "Hoy la empresa está quebrada, la administración del patrimonio está a cargo del juzgado, que va a tomar todos los pasos para preservar los activos, las maquinarias y las instalaciones de la empresa. Se van a buscar todos los mecanismos para que la empresa siga funcionando y los trabajadores conserven sus fuentes de trabajo", recalcó. Además, el ejecutivo reiteró que la entidad realizará una presentación ante la Securities and Exchange Commission (SEC), por el supuesto accionar fraudulento de la imprenta y disparó contra "algunos vivos que intentan insolventar filiales argentinas para beneficiar a sus casas matrices". Vanoli explicó que la presentación se realiza ante la SEC porque Donnelly es una empresa de EEUU y es necesario que se la investigue en ese país. "La SEC es una entidad muy celosa de todo lo que tiene que ver con los fraudes empresariales", recalcó y dijo que "es importante que se investigue y se persiga en la Justicia este tipo de situaciones".