Miércoles 20 de Diciembre de 2017, 09:46

Desde enero, pagarán Ganancias los sueldos a partir de $29.855

Economía | La cifra representa un aumento de casi el 29% sobre el actual, lo que implica un alivio fiscal que beneficia a los asalariados.

La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) actualizó los nuevos valores de las deducciones personales (mínimo no imponible, deducción especial y las cargas de familia) y los tramos de ingresos de las alícuotas que se utilizan para calcular la retención del Impuesto a las Ganancias en 2018. Según adelantó la misma entidad, con esos datos es posible estimar que los salarios más bajos alcanzados por el impuesto se elevarán casi un 29%. En este sentido, la oficina recaudadora informó que los valores son los siguientes: - Por las ganancias no imponibles hasta $ 66.917,91 anuales. - Por el cónyuge $ 62.385,20 anuales. - Por cada hijo, hija, hijastro o hijastra menor de 18 años o incapacitado para el trabajo $ 31.461,09 anuales. - Por la deducción especial de la cuarta categoría, hasta la suma de $ 66.917,91. Según la AFIP, “con estos nuevos valores, los empleados pagarán menos impuesto a las Ganancias sobre los salarios que cobren desde el primer día de enero”. Las actualizaciones están contempladas en la ley de Impuesto a las Ganancias, en sus artículos 23 y 90, que establecen un parámetro específico a través del coeficiente de variación anual de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte). Para las actualizaciones de los valores fue utilizado el índice Ripte a octubre del 2017, según especificó la AFIP. El efecto de este ajuste es que un grupo de trabajadores dejará de estar alcanzado por el impuesto. Y los que sigan incluidos tendrán, en principio, un alivio de la carga fiscal. De todas maneras, a lo largo de 2018 y cuando vayan subiendo nominalmente los salarios, ese efecto de una disminución del peso del impuesto, irá cayendo. El objetivo de la actualización automática de los valores dispuesta por ley es, de hecho, que no se incremente el porcentaje efectivo del impuesto, cuando éstos crecen para compensar los efectos de la inflación. La medida alcanza también a los autónomos, incrementando el monto de facturación a partir del cual tributan y aliviando la carga en general. Pero estos trabajadores siguen con un trato diferenciado, que los obliga a tributar más que los asalariados.