| La Cámara de Diputados convirtió en ley anoche el proyecto que contempla incentivos para la adquisición y construcción de vivienda única, con el que se busca facilitar el acceso al crédito hipotecario de los inquilinos.
La iniciativa impulsada por el Poder Ejecutivo, que fue respaldada por 111 votos contra 25 y 15 abstenciones, quedó convertida en ley esta noche, luego de que el oficialismo lograra aprobar la norma que contaba con media sanción del Senado sin modificaciones.
En el marco de la sesión, la norma fue respaldada por el oficialismo y cuestionada por varios bloques de la oposición que consideraron al texto como "inocuo", al argumentar que se trata de una iniciativa "meramente declarativa", excepto el radicalismo que se abstuvo a la hora de votar en general el proyecto.
Desde el oficialismo, el proyecto fue defendido por Marcela Bianchi Silvestre, vicepresidenta de la comisión de Vivienda, quien destacó que la norma "rompe con el sistema cuota ingreso porque da la posibilidad de acceder a una vivienda con una cuota asimilable al alquiler que hoy pagan los inquilinos".
En esa línea, el titular del bloque FPV-PJ, Agustín Rossi, destacó que el proyecto busca "una alternativa para alrederor de 500 mil inquilinos" y rechazó los cuestionamientos formulados por la oposición, al sostener que "no es cierto que estemos haciendo una ley para favorecer a las empresas constructoras".
Desde el radicalismo, que anticipó que se abstendría a la hora de votar la norma, la diputada Liliana Bayonzo, titular de la comisión de Vivienda, sostuvo que la norma "no resuelve el problema estructural de acceso a la vivienda de los inquilinos", al asegurar que "el desfasaje entre la cuota y los ingresos de los ciudadanos sigue siendo el principal escollo".
Por su parte, el titular del bloque Justicialismo Nacional, Jorge Sarghini, anticipó el rechazo de esa bancada al proyecto, al sostener que "no incentiva ni la construcción ni la adquisición" de viviendas y afirmó que tiene "un sólo efecto real que es resolver la situación impositiva de las empresas que caminan al borde de la ley".
El debate del proyecto, que tenía preferencia para ser tratado en el recinto, fue postergado hace 15 días, debido a un planteo de la oposición que pidió más tiempo para analizar la iniciativa impulsada por el Poder Ejecutivo.
Si bien la oposición manifestó su coincidencia con el espíritu del proyecto, planteó sus cuestionamientos en el recinto en torno a la efectividad de la iniciativa y consideró que la norma podría "tornarse meramente declarativa".
Para los kirchneristas, en tanto, la nueva ley no es un subsidio a las empresas constructoras, como planteó la oposición, sino "la posibilidad de acceder a la vivienda única".
El texto propone un "régimen general de incentivos para la adquisición y construcción" de viviendas, al contemplar la "implementación de créditos destinados a locatarios", a "inquilinos que suscriban contratos de leasing y a quiénes posean terreno propio destinado a la construcción de vivienda".
Además, el proyecto prevé la "devolución y compensación del Impuesto al Valor Agregado (IVA)", que será un beneficio otorgado a quiénes construyan los inmuebles.
La iniciativa está destinada a quiénes hayan alquilado por un plazo no menor a ochos meses y que hayan pagado en tiempo y forma los alquileres.
Los montos de las cuotas para amortizar el crédito otorgado por la ley deberán ser similares a los que el inquilino abonaba como alquiler y las viviendas tendrán que tener características iguales a las que alquilaba.
El beneficio comprende a la construcción de nuevas unidades de vivienda o la terminación de viviendas que no superen los 120 metros cuadrados.
Fuente: Télam.
