Miércoles 23 de Abril de 2008, 10:36

El Gobierno pide embargos a los dueños de campos incendiados

| El Gobierno nacional solicitó ayer el embargo preventivo a los campos individualizados como los lugares donde se iniciaron los incendios, al presentarse como querellante en la investigación judicial sobre la quema de pastizales que afectan al norte bonaerense y sur entrerriano.

En la presentación, realizada a través de la Secretaría de Ambiente de la Nación, se solicita la inhibición de esos bienes por un valor de 201 millones de pesos, al tiempo que se pide al juzgado de Campana que se remitan informes de dominio y de gravámenes que tributaron los dueños de los campos siniestrados. En tanto, la titular del área, Romina Picolotti, volvió a calificar de “grave daño ambiental” lo ocurrido con la quema masiva de pastizales “debido a que afectaron a un bien colectivo, en este caso, el humedal conformado por el delta del río Paraná, el segundo en Sudamérica en cuanto a extensión”. Por su parte, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, afirmó que la causa judicial que tramita en Campana, en la que hay un detenido y tres prófugos, “fue iniciada por un vecino de un campo que estaba cansado de decirles que no prendan fuego”. El funcionario aclaró que “lo que hizo el Gobierno fue aportarle a la Justicia la lista de los titulares de los campos, y de los arrendatarios, para que se investigue”. “Lamentamos que algunos dirigentes tengan una defensa corporativa, cerrada y sin razón, de no reconocer que han sido productores agropecuarios los que han producido este hecho lamentable”, enfatizó el ministro. Mientras, decenas de bomberos y brigadistas continuaban con el combate de los focos que se redujeron en un 40% en territorio bonaerense pero que se reavivaron en el sur de Entre Ríos, especialmente en la zona de Victoria y cerca de la Ruta 14. Luis Felker, jefe de prensa del Municipio de Zárate, precisó que entre 120 y 150 brigadistas, más el personal del Ejército, están abocados al operativo y aseguró que para combatir las llamas se utilizan, además, tres aviones hidrantes, dos de los cuales tienen capacidad para 2200 litros de agua y otro 3200. Por su parte, el gobierno porteño informó en las últimas horas que se atendió a un centenar de bomberos, principalmente con oxígeno, en el hospital de campaña que instaló en Zárate. Los efectivos actúan en grupos de entre 35 a 40 personas en determinadas zonas y luego son trasladados en helicóptero hacia otros lugares donde también hay focos activos, y, ante la imposibilidad de extender líneas de mangueras, sus principales armas para apagar el fuego son machetes y fustas.