| El sacerdote Julio Grassi deberá afrontar una nueva instancia judicial al confirmar ayer el Juzgado del juez Carlos Narvarte de El Calafate su procesamiento por el delito de abuso y corrupción de menores, en la denominada "causa Calafate".
De esta manera, este procesamiento se suma a los dos juicios que tendrá que afrontar en agosto, referidos a dos causas por los mismos delitos, que la imputación que recibió en El Calafate.
Los abogados de Grassi y los querellantes en nombre de la supuesta víctima recibieron la notificación del procesamiento por el abuso y corrupción del joven L G (iniciales), pese a que hace un par de días había vencido el plazo para que el Juez diera a conocer su decisión.
La víctima, ahora mayor de edad, acusó al sacerdote de una serie de hechos que se habrían iniciado en un viaje a El Calafate años atrás.
El testimonio del chico hace referencia a que «el cura se sobrepasó mientras estuvieron en la villa y que al volver a Buenos Aires comenzaron los abusos».
La decisión del juez se conoció luego de una larga declaración indagatoria que por más de diez horas se le tomó el pasado 27 de mayo a Grassi, en la Villa turística del El Calafate.
En aquella oportunidad, el sacerdote se había mostrado confiado y optimista de que llegaría a un sobreseimiento de la imputación, al afirmar que «la causa comenzaba a caerse y que había sido orquestada por un ex empleado de la Fundación Felices Los Niños, enojado por su despido».
La resolución, que tiene alrededor de 55 fojas, fue enviada a los letrados intervinientes, mientras que desde la querella se mostraron conformes con la decisión del juez.
De todas maneras, se abre ahora un período de cinco días hábiles para que las partes puedan apelar la decisión del juez, que de hacerse, deberá ser resuelta, dicha apelación, por el Juez de Recursos Rubén Lobos.
