| Un nuevo récord, pero no es para festejar. El tren El Gran Capitán demoró 53 horas en recorrer los 1.100 kilómetros que separan Buenos Aires de la estación Posadas. Los casi 400 pasajeros llegaron hastiados y muy pocos fueron los que exigieron la devolución del pasaje porque debían aguardar la llegada de un funcionario de Trenes Especiales Argentinos (TEA) para recuperar el dinero.
La formación había partido de Buenos Aires a las 10.50 desde la estación Federico Lacroze con unos 700 pasajeros y el viaje no sufrió mayores contratiempos hasta la ciudad correntina de Monte Caseros. Allí permaneció varado durante 18 horas porque un convoy de la empresa América Latina Logística (ALL), la empresa concesionaria del servicio de cargas, había descarrilado cerca de Paso de los Libres. El retiro de los 12 vagones que saltaron de las vías con distintas cargas se demoró más de lo previsto y los pasajeros tuvieron que soportar con paciencia que finalizaran los trabajos de reparación de las vías.
Mientras, en la estación Posadas decenas de pasajeros durmieron sobre el andén a la espera de la formación que debían abordar para regresar a Buenos Aires. Algunos recurrieron a los micros tras lograr el reintegro del dinero de los pasajes. En situaciones normales, El Gran Capitán demora 26 horas en unir Buenos Aires con Posadas, ya que en varios tramos el estado de las vías obliga a transitar a paso de hombre.
El gerente de la empresa TEA, Javier Cantero, dijo que los usuarios recibieron comida y bebidas y que fueron muy pocos los que pidieron el reintegro del pasaje. Sin embargo, una mujer que viajaba con sus hijos dijo que la cena fue un choripán para cada pasajero y fue servido a las 2 de la mañana. También hubo quejas por la escasez de agua.
Fuente: Ernesto Azarkevich corresponsar diario Clarín.