| Juró ayer como diputado nacional el dirigente socialista Jorge Rivas, en una ceremonia inusualmente concurrida y emotiva, y después de una prolongada terapia que aún sigue después de la golpiza que lo dejó al borde de la muerte hace un año y medio atrás.
Un año y medio tardó Jorge Rivas en asumir su banca. En noviembre de 2007, poco después de que ganara una banca en la Cámara baja en los comicios de octubre, el socialista K fue víctima de un robo en el que los ladrones le dieron un solo golpe en la cabeza que, sin embargo, lo dejó inconsciente y con graves problemas neurológicos.
Rivas llegó al Congreso en la silla de ruedas en la que se mueve habitualmente. Y juró a través del programa de computación que usa para comunicarse y que opera con la mirada.
Interrumpiendo el receso de hecho que se dio en Diputados por la campaña electoral, hoy el recinto estuvo bastante poblado de legisladores. Y, sobre todo, de invitados, entre los que se dejó ver el ex presidente Néstor Kirchner.
Después de la jura, la mujer de Rivas lagrimeaba emocionada mientras sus hijos lo vivaban saltando de alegría.
El diputado integrará el bloque del socialismo afín al kirchnerismo que conduce Ariel Basteiro. En el partido, era -hasta el robo en el que casi lo matan- el referente más importante de ese sector, en el que también milita el secretario de Relaciones Parlamentarias del Gobierno, Oscar González.
Fuente: AIM.
