Miércoles 23 de Noviembre de 2005, 23:43

Estarían negociando la relocalización de las papeleras

| El tema estaría siendo tratado por las cancillerías argentina y uruguaya, de acuerdo a lo difundido anoche en un programa de América 2.

Las cancillerías de la Argentina y el Uruguay se encontrarían negociando la posibilidad de un traslado de las plantas papeleras, desde Fray Bentos unos cien kilómetros al sur, prácticamente sobre el Delta entrerriano. La versión, fue difundida anoche en el informativo de América TV que conduce Rolando Graña. El rumor señala que, a partir de la idea de la ombudsman del Banco Mundial, Meg Taylor, de pedir que las papeleras en el Uruguay funcionen bajo un estricto control, las cancillerías comenzaron a analizar otras posibilidades. En ese sentido, la versión indica que las papeleras podrían trasladarse dentro del Uruguay unos cien kilómetros al sur, zona de Soriano, sobre el río Uruguay y zona del Delta, como para sacarlas del foco conflictivo, que es la ciudad de Fray Bentos. Las empresas que planean la instalación en Fray Bentos, habrían dicho que no tendrían inconvenientes, pero solicitarían un resarcimiento por el dinero que ya gastaron sobre la localidad ubicada sobre el río Uruguay, frente a Gualeguaychú. Se desconoce si el rumor que lanzó América TV es un globo de ensayo, para ver qué reacción provoca la noticia, o si efectivamente el tema está en la agenda de los cancilleres. En ese sentido, cabe agregar que radio maxima ha informado sobre las negociaciones para una relocalización de las plantas, dentro del Uruguay, pero más lejos de Gualeguaychú. Las empresas que procuran instalarse, son realmente poderosas, pero también en la Argentina ha sorprendido la movilización del pueblo de Gualeguaychú para resistir la instalación de las papeleras, lucha que incluso llevaría a un boicot a la temporada turística de verano en el Uruguay, que se nutre mayoritariamente de argentinos. Este hecho, más el hecho de que la Aduana Argentina trabó el paso al Uruguay de estructuras de hormigón destinadas a la construcción de la planta de la empresa finlandesa Botnia, podrían haber llevado al Uruguay a aceptar un diálogo sobre la relocalización, medida con la cual se disiparía en Gualeguaychú una lucha que amenaza convertirse en violenta. Fuente: Infover.