Lunes 12 de Junio de 2006, 11:46

ESTIMA QUE LA HAYA TENDRÁ UNA SENTENCIA EN DOS MESES

PAPELERAS | Raúl Estrada Oyuela, representante especial para Asuntos de Medio Ambiente de la Cancillería, cuestionó que el país vecino se haya referido “a cosas que no tienen que ver con el pleito” por la construcción de las papeleras. Estiman que en dos meses se conocería la resolución del Tribunal sobre la medida cautelar que solicita frenar las obras.

Luego de los alegatos presentados por Argentina y Uruguay ante la Corte de Justicia Internacional de La Haya, a partir de la controversia por la radicación de las plantas procesadoras de pasta celulosa, siguen los cruces entre las partes involucradas. El representante para negociaciones ambientales de la Cancillería, Raúl Estrada Oyuela, consideró que fue “una estridencia equivocada” de Uruguay haberse referido en La Haya “a cosas que no tienen que ver con el pleito” por la construcción de las dos plantas de celulosa en Fray Bentos. En tanto, Estrada Oyuela aseguró que la delegación argentina se va de La Haya “con la sensación del deber cumplido”, transcribió El Diario. “Nuestra obligación era venir a presentar el caso con claridad y eficiencia y estoy seguro que lo hicimos”, enfatizó Estrada Oyuela en declaraciones a radio Mitre desde La Haya, donde participó de las audiencias ante la Corte Internacional. [b]Defensa[/b] Estrada Oyuela sostuvo que “es un proceso que tiene que ser frío porque acá el que se pone nervioso pierde, de modo que la posición argentina fue racional y bien fundada y deliberadamente tomamos una actitud de no estridencia, pero sí hubo estridencias de la otra parte, que son equivocadas”. El funcionario de la Cancillería dejó en claro que Argentina concurrió al Tribunal de La Haya “a defender los derechos sobre el río, y a mostrar que el Tratado del Río Uruguay fue violado reiteradamente por ese país”. Al mismo tiempo, agregó que se concurrió para mostrar que la forma en que han autorizado esas plantas “se ha hecho con tal descuido, lo que produciría un perjuicio enorme, un daño ecológico fuerte, no sólo en recursos específicos sino en el sistema ecológico”, concluyó. La Corte Internacional de La Haya se expedirá en un plazo “no mayor a ocho semanas” sobre la procedencia de la medida cautelar que reclamó la Argentina para paralizar la construcción de las papeleras hasta tanto el tribunal se pronuncie en forma definitiva en el diferendo con Uruguay. Las fuentes consultadas tampoco descartaron la posibilidad de que la Corte Internacional pueda convocar a Argentina y Uruguay a una “nueva instancia de negociación”, porque los magistrados pueden explorar otros caminos antes de pedir la paralización de las obras. También existe la posibilidad de que la Corte no haga lugar a la medida cautelar que pidió Argentina, en cuyo caso las empresas Botnia y ENCE quedarán habilitadas para proseguir con las obras hasta que salga el fallo definitivo, algo que sucederá recién dentro de tres a cinco años. [b]Reuniones reservadas[/b] Comenzó a vislumbrarse el pronunciamiento de la Corte Internacional de La Haya. Más allá del fallo, el futuro dependerá de dos o tres hechos que por ahora se mantienen en reserva. El diario Crónicas de Mercedes, de Uruguay, dice que entre las posibilidades a futuro, puede mencionarse una posible reunión entre los presidentes para recomponer las relaciones; otra se está manejando en Gualeguaychú en total secreto por parte de los ambientalistas; la tercera es la estrategia que ensayará la Cancillería uruguaya para el caso de que vuelvan los cortes. El periódico de Mercedes señala que “si Argentina vuelve a permitir los cortes, Uruguay tendrá razones para protestar, pero pocas posibilidades de evitar las consecuencias. Si los ambientalistas ensayan otro tipo de estrategia, es la discusión que en secreto se está desarrollando en Gualeguaychú. Lo que hará el Gobierno argentino en tal caso, es una incógnita, siempre que (como se espera) la Corte Internacional de Justicia emita un veredicto favorable a Uruguay”. Agrega el artículo que “de lo que todos en Uruguay están seguros es que la salida pasará inevitablemente por convencer a los argentinos de que la postura uruguaya es correcta. La certeza es que no bastará con que los jueces de La Haya se convenzan, sino que la persuasión tendrá que hacerse a los miles de entrerrianos que hoy creen otra cosa. Esta postura (la más sensata) fue explicada por el ex ministro Sergio Abreu y terminará imponiéndose aunque por ahora la ebullición de un supuesto “triunfo” en los alegatos de Holanda, hacen perder de vista el día después”, publicó el diario uruguayo. Así se observa el futuro cercano en el Uruguay, donde temen reacciones en Gualeguaychú tras La Haya. Fuente: APF.