Jueves 17 de Agosto de 2006, 22:44

Ex secretaria de un ex senador confirmó el pago de sobornos

| Una ex colaboradora de Remo Costanzo se presentó hoy a declarar en la causa y admitió haber visto 300.000 dólares en el despacho de su ex jefe; es el primer testimonio que acredita los dichos del arrepentido Mario Pontaquarto.

Como un volcán en erupción, la confesión del ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto provocó una explosión en la causa que investigaba el supuesto pago de sobornos a los senadores para aprobar la ley de reforma laboral durante el gobierno de Fernando de la Rúa. Dos dos años y medio después, ese volcán volvió a reaccionar y un nuevo testimonio conocido hoy provocó, otra vez, el estallido. Una empleada del Senado que trabajó como secretaria del ex legislador Remo Costanzo aseguró hoy ante la Justicia que se pagaron coimas. Lo hizo al admitir haber visto 300.000 dólares en el despacho de su ex jefe. La mujer, de nombre Sandra, se presentó a declarar como testigo ante el juez federal Daniel Rafecas y aseguró que vio 300.000 dólares en el despacho del entonces senador el 27 de abril de 2000, un día después de sancionada la norma. Se transformó así en la primera testigo que ratificó los dichos de Pontaquarto. Además, la mujer declaró que su ex jefe le contó que era el encargado de repartir el dinero entre los demás senadores: Emilio Cantarero, Alberto Tell y Angel Pardo. Y también dijo que Costanzo esperaba recibir el doble del dinero, es decir, 600.000 dólares. Este testimonio, clave en la causa, complica la situación de todos los procesados pero también vuelve a involucrar a Pardo, que había sido beneficiado con la falta de mérito en la causa. En medio de las nuevas declaraciones y avances de la investigación, el juez Rafecas deberá resolver la situación procesal de De la Rúa, que ya declaró en dos oportunidades como imputado. De hecho, el testimonio de hoy de la secretaria de Costanzo lo involucró. La mujer dijo que en Casa de Gobierno "se rumoreaba que Fernando de la Rúa sabía" del pago de sobornos, aunque no aportó ninguna evidencia concreta al respecto. En sus indagatorias, Costanzo había negado siempre el cobro de dinero para aprobar la ley y había tratado de "mentiroso" al ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto, el "arrepentido". La declaración de hoy bajo juramento de su ex secretaria complica entonces la versión del legislador rionegrino. Pero fue él quien por primera vez en seis años había admitido ante la Justicia que la noche del supuesto pago estuvo en la casa del ex senador Emilio Cantarero (PJ), el lugar en el que -según la versión de Pontaquarto- se concretó la maniobra. Fuente: La Nación on Line.