Viernes 10 de Octubre de 2008, 10:27

Fernández insistió con despenalizar el consumo de drogas

| El ministro de Justicia, Aníbal Fernández, afirmó ayer que la Argentina “es un país de tránsito y no de producción” de drogas, y se manifestó a favor de despenalizar el consumo de esas sustancias y concentrar los esfuerzos del Estado en la represión del narcotráfico.

Fernández adelantó que en los próximos días el Gobierno dará a conocer un decreto para aumentar el control de las sustancias empleadas para el corte o fabricación de drogas, como es el caso de la efedrina. El ministro rechazó que en la Argentina haya producción de drogas, y negó que el “paco” sea un derivado de la fabricación de cocaína, al señalar que análisis hechos a esa sustancia han revelado que no contiene rastros de clorhidrato de cocaína. Fernández destacó luego que “este es el gobierno que más droga ha decomisado, y el primero que detiene a cabecillas y no sólo a perejiles”, al tiempo que sostuvo que el énfasis está centrado en desarrollar una “fuerte represión del narcotráfico”. Sobre la despenalización del consumo, dijo que sueña con el día en que “cuando un policía encuentre en la calle a un joven ’dado vuelta’ no lo lleve a la comisaría sino a un hospital”. Indicó que “más de quince países de Europa tienen leyes más benignas que Argentina y hay menor consumo”, y citó el caso de Portugal, que descriminalizó la tenencia para uso personal en el año 2000, y que desde entonces registró un descenso en el uso de drogas. Dijo luego que en la década del 60 “se impuso la doctrina Nixon”, basada en reprimir a los consumidores de drogas, y que aquí esa idea “fue adoptada por el nefasto (ex ministro de Bienestar Social) José López Rega, quien llegó casi a parangonar a los adictos con los subversivos”. En cambio, Fernández destacó el fallo de la Corte Suprema en el denominado Caso Bazterrica -uno de los integrantes del grupo de rock Los Abuelos de la Nada-, el cual establece que el consumo de drogas, en tanto no afecte a terceros, “es una acción privada de los hombres”, y que en consecuencia debe estar fuera del alcance de la justicia. El ministro dijo que “equiparar al comprador con el vendedor no da resultados”, e hizo notar que “sólo el 2,8 %” de las causas iniciadas en los tribunales tienen resolución judicial. Agregó que el Estado gasta en juicios a consumidores el equivalente a dos veces lo que se invierte en la lucha contra el sida, y al 40 % de todos los planes alimentarios. Fernández se expresó de este modo durante las “Primeras Jornadas Nacionales sobre Políticas Públicas en Materia de Drogas”, que se iniciaron ayer en la sede del Colegio de Abogados de la Capital Federal.