Lunes 23 de Enero de 2006, 14:42

Habría acuerdo para dejar quieto por un año el precio de

| Luego de largas y duras negociaciones, el Gobierno firmaría en las próximas horas un acuerdo con la cadena ganadera para estabilizar por un año el precio de la carne vacuna.

El pacto establecerá un valor de referencia para la media res de novillo de 4,40 pesos por kilo. Pero irá más allá. También formalizará una línea crediticia por 300 millones de pesos. Y dejará abierta la puerta para una rebaja de las retenciones a la exportación. Pese al hermetismo que impuso Economía en torno a esta negociación, Clarín logró acceder de fuentes privadas a una copia del acuerdo, que el presidente Néstor Kirchner podría firmar hoy mismo, o a más tardar mañana. Se trata de un texto de cuatro carillas. La última de ellas está prácticamente dedicada a los nombres de todas las organizaciones que lo firmarán. Hay seis entidades de productores, cuatro de frigoríficos y tres de consignatarios de hacienda. Con este nuevo pacto, el Gobierno apunta a mantener el ritmo que se impuso en su lucha para contener la inflación. Ayer, fuentes de Economía dijeron que "se espera firmar de a dos acuerdos de precios por día" de aquí a fin de mes. El de la carne será uno de los de mayor relevancia, por el peso que tiene el alimento en la inflación y en el humor de los argentinos. Las negociaciones con el sector se iniciaron el jueves, ya que Kirchner deseaba anunciar este pacto un día después. Sin embargo, la gran dispersión de intereses en la cadena se extendieron más de lo pensado. Finalmente, el texto del acuerdo recién pudo ser distribuido el sábado por la noche. Antes hubo que superar situaciones conflictivas. Por caso, la Sociedad Rural y Confederaciones Rurales (CRA) amagaron dejar la mesa de discusión. La pipa de la paz se fumó recién cuando se excluyó del texto una referencia explícita del valor que se pretendía imponer a los novillos que llegan al Mercado de Liniers, y que era de 2,40 pesos por kilo vivo. Los ruralistas, en esta caso, se cansaron de repetir que los productores "no son formadores de precios". De todos modos, el Gobierno logró lo que quería (consensuar precios de referencia) en el siguiente eslabón: las plantas de faena. En este caso el texto es bien preciso: "La industria frigorífica asume el compromiso de ofrecer la media res en la categoría novillo a un precio promedio mensual no superior a 4,40 pesos más IVA por kilogramo a la salida de planta". Ese valor solamente se podría mantener a lo largo de 2006 si Liniers no se dispara. Es decir —como reza el acuerdo— que es "compatible"con las actuales cotizaciones ganaderas. En lo que va de enero, el novillo promedió 2,315 pesos, muy cerca de los 2,40 pretendidos. El consumidor no debiera, en este contexto, tener muchas expectativas, ya que el pacto apunta más a mantener los precios de la carne en el mostrador que a bajarlos. Por otro andarivel pasa la negociación con supermercados y carnicerías, a los que el Gobierno acusa de no trasladar la fuerte baja de los precios ganaderos, de un 10% desde diciembre. Hay, sin embargo, otros puntos que impactarán en el mercado. Uno de ellos es el compromiso de los privados para "realizar todos los esfuerzos para alcanzar un normal abastecimiento del mercado". En este punto incluso se pone número a lo que sería una oferta "normal". Son 180 mil toneladas de carne al mes. Por el lado del Gobierno y como adelantó Clarín, hay varias promesas. La de mayor importancia es una línea de créditos a tasa subsidiada para fomentar la producción, por $ 300 millones. Pero hay otras concesiones. Economía prometerá esforzarse para "evitar aumentos significativos en los costos de las empresas" (léase reclamos salariales) y, todavía más importante, dispondrá "reconsiderar de inmediato el tratamiento arancelario en los distintos cortes vacunos". Esto, ni más ni menos, es la revisión de la suba de retenciones a la carne, y que fue del 5 al 15%. Fuente: Clarín.