Así lo confirmaron fuentes del entorno de la magistrada.
El descubrimiento se habría producido ayer por la mañana en la caja telefónica de su oficina, lo que derivó en una denuncia en el juzgado de Julián Ercolini, quien investiga el robo producido en mayo pasado en las oficinas de la jueza.
Según informaron fuentes judiciales, el dispositivo de escuchas se activaba al levantar el tubo para hacer o contestar un llamado.
Además del micrófono, en la inspección se descubrió que el cajón del escritorio de la jueza -que había abierto por última vez el viernes pasado- había sido forzado y que la llave estaba dentro de la cerradura, pero rota.
Fuente: NA.
