Viernes 17 de Junio de 2016, 10:30

Hoy es feriado por la muerte de Martín Miguel de Güemes

Política | Es la primera vez tras la reciente promulgación por parte del Ejecutivo Nacional de la ley que sancionó el Congreso.

Martín Miguel de Güemes, el líder de la guerra gaucha que frenó el avance español con sus tácticas guerrilleras, nació en Salta el 8 de febrero de 1785. A los catorce años ingresó a la carrera militar y participó en la defensa de Buenos Aires durante las invasiones inglesas como edecán de Santiago de Liniers. Tras la Revolución de Mayo, se incorporó al ejército patriota destinado al Alto Perú y formó parte de las tropas victoriosas en Suipacha. Regresó a Buenos Aires y colaboró en el sitio de Montevideo. Güemes volvió definitivamente a Salta en 1815. Gracias a su experiencia militar, pudo ponerse al frente de la resistencia a los realistas y el 15 de mayo de 1815 fue electo gobernador de su provincia, cargo que ejerció hasta 1820. A principios de 1817, Güemes fue informado sobre los planes del mariscal De la Serna de realizar una gran invasión sobre Salta. Se trataba de una fuerza de 3.500 hombres integrada por los batallones Gerona, Húsares de Fernando VII y Dragones de la Unión. Güemes puso a la provincia en pie de guerra y organizó un verdadero ejército popular. El 1º de marzo de 1817, Güemes logró recuperar Humahuaca y se dispuso a esperar la invasión. Los realistas habían recibido refuerzos y ya sumaban 5.400. La estrategia de Güemes será una aparente retirada con tierra arrasada, pero con permanente hostigamiento con tácticas guerrilleras. En estas condiciones las fuerzas de De la Serna llegaron a Salta el 16 de abril de 1817. El boicot de la población salteña fue absoluto y las tropas sufrieron permanentes ataques relámpago. El general español comenzó a preocuparse. No lo ayudaron las noticias que llegaron desde Chile confirmando la victoria de San Martín en Chacabuco; con ello De la Serna decidió emprender la retirada hacia el Alto Perú. En marzo de 1819, se produjo una nueva invasión realista. Güemes se preparaba nuevamente a resistir. Sabía que no podía contar con el apoyo porteño: su viejo rival José Rondeau era el nuevo director supremo de las Provincias Unidas. En 1820, caían las autoridades nacionales y comenzaba una prolongada guerra civil. En ese marco, se produjo una nueva invasión española. En febrero, el general Canterac ocupó Jujuy y logró tomar la ciudad de Salta. San Martín, desde Chile, le renovó su confianza y nombró a Güemes jefe del Ejército de Observación sobre el Perú. A Canterac no le irá mejor que a De la Serna: terminará retirándose hacia al Norte. El año 1821, fue sumamente duro para Güemes porque a la amenaza de un nuevo ataque español se sumaron los problemas derivados de la guerra civil. Güemes debía atender dos frentes militares: al Norte, los españoles; al Sur, el gobernador de Tucumán Bernabé Aráoz que, aliado a terratenientes salteños, hostigaba permanentemente a Güemes, quien sería derrotado el 3 de abril de 1821. Güemes se refugió en casa de su hermana Magdalena Güemes de Tejada desde donde, al intentar su repliegue a caballo, recibió un balazo en la espalda pero logró llegar, gravemente herido, a su campamento de Chamical con intención de preparar la novena defensa de Salta. Ante su agravamiento, reunió a sus oficiales y les transfirió el mando y dio las últimas indicaciones, pero murió el 17 de junio de 1821 en Cañada de la Horqueta. El pueblo salteño concurrió en masa a su entierro en la Capilla de Chamical y el 22 de julio le brindó el mayor homenaje al jefe de la guerra gaucha: liderados por el coronel José Antonio Fernández Cornejo, los gauchos de Güemes derrotaron a los invasores y expulsaron para siempre a los españoles de Salta. Hoy, por primera vez, a partir de la sanción de la Ley 27.258 -promulgada el 9 de junio- es feriado nacional y día no laborable en todo el territorio argentino, en conmemoración del fallecimiento del General Don Martín Miguel de Güemes. La norma establece que el Estado debe desarrollar acciones de difusión tendientes a promover la reflexión sobre la personalidad del prócer y su gesta en defensa de la libertad e independencia de la patria. La iniciativa se aprobó en el Senado con el respaldo de la mayoría, obtuvo 47 votos a favor y sólo 6 en contra. Quienes se opusieron fueron los senadores Marta Varela (Pro-CABA), Ernesto Martínez (Frente Cívico-Córdoba), Alfredo De Angeli (Pro-Entre Ríos), Jaime Linares (GEN-provincia de Buenos Aires) y Fernando Solanas (Proyecto Sur-CABA).