Miércoles 23 de Mayo de 2007, 11:07

Kirchner defendió su gestión y apeló a la memoria

| El jefe de Estado apeló a la “memoria de los argentinos” y en medio del escándalo del caso Skanska que se cobró un tercer funcionario -el subsecretario de Obras Públicas, Raúl Rodríguez- tuvo palabras de respaldo para De Vido. También advirtió: “Me van a seguir atacando, pero el 28 de octubre el pueblo rebalsará las urnas”. Defendió la rescisión del contrato de concesión por el Roca y Belgrano.

En el marco de un acto de firma de convenio de obras públicas que encabezó junto al gobernador de Formosa, Gildo Infrán, el presidente de la Nación, Néstor Kirchner efectuó una férrea defensa de su gestión e hizo una abierta apelación “a la memoria del pueblo que el 28 de octubre va a elegir el cambio definitivo de rumbo de la Argentina”. “El 28 de octubre la Argentina va a demostrar si opta por el modelo de la transformación y el cambio o el modelo neoliberal de la concentración del país para unos pocos”, remarcó, en campaña, por enésima vez, pese a que siempre insiste en aclarar que cada acto que encabeza en la Casa Rosada no está inmerso en campaña alguna. “Habrá que optar por dos modelos bien visibles. El de la pluralidad y la diversidad o el de la concentración económica y de las políticas monopólicas. El modelo de una Argentina inclusiva donde siga generándose trabajo e industrialización y un crecimiento de nuestra actividad primaria con crecimiento de nuestro valor agregado”, resaltó. En medio de las derivaciones del caso Skanska-Techint, que este miércoles se cobró un tercer funcionario con la renuncia del subsecretario de Obras Públicas, Raúl Rodríguez, sin nombrarlo tuvo palabras de respaldo para Julio De Vido y Daniel Filmus cuando afirmó que “la Argentina fue capaz de construir, como en la década de los ’50, más de 700 escuelas. Las llevó adelante el Ministerio de Planificación, conjuntamente con el Ministerio de Educación, con nuestro gran Ministro que es Filmus”. Sobre los docentes, subrayó que “hoy tienen un mínimo de 1.040 pesos pero aún falta muchísimo para lograr la solución ideal para esos salarios” y valoró la activa participación de los docentes “conjuntamente con la CTERA para la elaboración de la nueva Ley de Educación, y para que se destine en 2010 -el año del Bicentenario que marcará, seguramente, el punto de inflexión para la Argentina-, el 6 por ciento del PBI a la educación”. . Luego reseñó: “Estamos llegando al 25 de mayo y se están cumpliendo 4 años de la Argentina que dejaron aquellos que se fueron en un helicóptero, la administraron durante varios años y la quebraron. La vaciaron de contenido”. También defendió la rescisión del contrato de concesión de los servicios de trenes de las líneas Roca y Belgrano, que estaban a cargo del empresario Sergio Taselli y recordó que se hizo lo mismo con el Correo Argentino y Aguas Argentinas. Ahora me critican “porqué no lo hice antes. Son los mismos que se quedaron callados cuando liquidaron los ferrocarriles en los ‘90”. En otro orden, Néstor Kirchner puntualizó que “hoy en la Argentina se volvieron a discutir los convenios colectivos y el crecimiento, con una participación activa de trabajadores y empresarios; hoy hay un país que se va desendeudando porque si Dios quiere la Argentina, que empezó con un 170 por ciento en la relación Deuda-Producto, va a estar a fines del 2007 bajando a un 58 por ciento esa relación”. “Hoy la pobreza e indigencia están estacionadas en menos de un dígito; y la pobreza en un 26,9, un número tremendo, pero hay que tener memoria para recordar que venimos del 60 por ciento de aquel 25 de mayo del 2003”, resaltó. En otro tramo de su discurso comenzó a cuestionar que “nuevamente la historia se repite porque esto pasó hace más de 50 años. Estamos, de un lado, los que queremos construir una Argentina con fuerza, integrada, con justicia y equidad, con una alianza policlasista entre los trabajadores y la clase media con movilidad ascendente y el nacimiento de empresarios nacionales y, por el otro, los que quieren un proyecto dependiente”. “Son los que se alegraban cuando venían las comisiones del FMI prácticamente a pisotear la propia dignidad de los argentinos. Nosotros queremos una Argentina que recupere esa dignidad que tuvimos en aquellos años felices. Pero también debemos recordar que antes de que empezara el proyecto neoliberal en el país la deuda externa era de 6000 millones de dólares”, recordó. Y cuestionó: “Nadie habla de eso. Los responsables de las distintas renegociaciones de la deuda y demás todavía, muchas veces, nos quieren dar lecciones”. Casi al final comenzó a hilvanar frases a manera de arenga como si estuviera en una tribuna a la cabeza de uno de los tantos actos que lo tienen como protagonista en distintos puntos del país: “Por eso les digo, argentinos, fuerza y convencimiento para corregir los errores que podamos cometer; fuerza y convencimiento para sumar pluralmente a todos los argentinos; fuerza y convencimiento para buscar en el marco de la verdad relativa la verdad sintetizadora que nos convoque a todos”, clamó. “Fuerza y convencimiento para no caer en la confrontación inútil que nos pueden provocar; fuerza y convencimiento para seguir construyendo una argentina que en la diversidad le pueda dar respaldo y respuestas a las miles de posiciones y esperanzas que esperan de los gobiernos que vendrán de forma sucesiva que se logre construir la Argentina que todos nosotros deseamos”, agregó. Más adelante volvió a pedir “fuerza y convencimiento para reconstruir la unidad latinoamericana y el MERCOSUR, para tener una voz fuerte y decidida en el mundo. También, para Tener fe en nuestras propias convicciones e ideas”. Por otra parte, el primer mandatario recordó: “Hace un tiempo atrás dije que me van a venir a atacar. Claro que me van a atacar. Lo van a hacer quienes no quieren que la Argentina cambie. Van a tratar de atacarme de cualquier manera, pero no se hagan problema. Yo ante cada ataque seguiré respondiendo con la caridad cristiana pero con ideas y con fuerzas”. “Cada ataque artero me dará más fuerzas y ganas para seguir trabajando. Lo hago con mucha felicidad. Vivo con alegría la oportunidad que me dio el pueblo argentino. Vivo con ganas y se que falta muchísimo”, siguió. Más adelante, tras anhelar que el 10 de diciembre “pueda decir a los argentinos que salimos del infierno para entrar en el purgatorio, Néstor Kirchner volvió a parafrasear a Martin Luther King cuando remarcó: “Yo tengo un sueño. Que el 28 de octubre con el amanecer, cuando ya las palabras, los discursos tediosos y las agresiones se terminen, cada argentino, los que me están viendo aquí y los que están en sus hogares, van a salir de sus casas y en toda la Argentina, desde Tierra del Fuego a Jujuy van a confirmar su vocación de cambio”, vaticinó. Asimismo, añadió que “ese 28 de octubre van a profundizar la construcción de una Argentina con equidad, justicia social, autonomía en la globalización, con integración latinoamericana, desarrollo industrial, educación, trabajo y crecimiento en nuestras universidades y empresas”. Al final insistió en dejar instalada la duda: “Será el pueblo argentino quien finalmente decida cuando llegue la definición si “será pingüino o pingüina” el candidato a presidente en las elecciones de octubre”. Fuente: Pedro Romero de la redacción de Agencia Nova.