| El presidente Néstor Kirchner expresó hoy la decisión de avanzar con "madurez y responsabilidad" en la integración bilateral entre la Argentina y Chile y destacó la necesidad de superar "dificultades por la vía del diálogo y la confianza mutua".
Kirchner enfatizó que la integración implica "discutir, acordar y, a veces, disentir" y reafirmó su convicción profunda en la alianza bilateral.
"Este presidente cree profundamente en esta alianza y que el proceso en marcha ha alcanzado la madurez para superar dificultades por la vía del diálogo y la confianza mutua", definió el jefe de Estado luego de compartir una reunión con la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, en la provincia de Mendoza.
"Estamos dispuestos, con madurez y responsabilidad, sin hipocresías y con sinceramiento a resolver las controversias para una verdadera consolidación", agregó.
El mandatario argentino se dirigió en tono afectuoso a Bachelet a quien aludió como "estimada presidente" y destacó la decisión de avanzar en "la desafiante tarea" que emprendieron ambos países con el objetivo de estar "cada días más unidos entre sí".
El jefe de Estado no evitó abordar las aristas de la relación bilateral al sostener que "integrarse no es fácil, tiene idas y vueltas, pero cuando se trata de compatibilizar intereses, es necesario discutir, y acordar, y a veces, disentir".
Kirchner remarcó que el desarrollo de una estrategia bilateral de integración "debe ser ejecutada en acciones concretas y no declamadas" y remarcó como uno de esos puntos la reconstrucción del ferrocarril trasandino.
La integración "debe ser analizada como un proceso sin que las dificultades la interrumpan o hagan caer en el pesimismo", destacó el mandatario argentino y manifestó que la "concordancia creciente superará el aislacionismo que algunos nostálgicos expresan en nuestros países".
El presidente argentino subrayó también que se avanzó "mucho y hay un largo trayecto para recorrer" y que las coincidencias bilaterales permitirán superar obstáculos "dejando atrás la época de las teorías conspirativas".
Cuestionó luego las visiones "sectarias que quieren creer que la Argentina y Chile deben competir permanentemente. La miopía histórica les impide ver este proceso de integración".
El jefe del Estado confió en que se está "a la altura de los procesos de consolidación de la unidad entre la Argentina y Chile, más allá de los tiempos de mandatos", aunque "no es fácil compatibilizar las relaciones entre los dos países".
Con tono cordial, Kirchner invitó a "la querida presidente" Bachelet sentirse "en su casa, en su provincia, en su país".
