Viernes 6 de Octubre de 2006, 10:32

LA DERECHA RECLAMA UNA ANMISTÍA GENERAL

| Las organizaciones convocantes al acto de homenaje a las "víctimas de la subversión" reclamaron que se declare una "ley de amnistía general" sobre los protagonistas de los hechos de violencia de los años 70 que permita recuperar la "concordia" en la Argentina.


"Le pedimos al Gobierno la aplicación de la más amplia ley de amnistía general de concordia que ponga fin a un ciclo trágico de la historia argentina y que incluya a aquellos que mataron a nuestros padres", reclamó José Sacheri, titular de la Asociación de Víctimas del Terrorismo en la Argentina. Sacheri también pidió por la aparición del testigo Jorge Julio López. Lo hizo al concluir un acto al que asistieron unas tres mil personas en la Plaza San Martín, en el que abundaron las críticas contra el Gobierno por "abrir heridas" y que estuvo marcado por la tensión que se generó por la presencia de una "contramarcha" protagonizada por partidos de izquierda. Antes del comienzo, algunos participantes de la recordación corrieron en busca de los militantes de izquierda que se acercaban por la avenida Santa Fe, pero fueron contenidos por la Policía. Separados por un doble cordón policial que se armó a la fuerza, los dos sectores se gritaban "asesinos, asesinos", aunque la tensión cedió tras unos momentos. Luego, las organizaciones de izquierda se trasladaron al cruce de Esmeralda y Santa Fe, donde cantaban contra los asistentes al acto y se escuchaban con fuerza cuando durante el acto se realizaban minutos de silencio en memoria de las víctimas. Durante el acto, los organizadores leyeron mensajes de adhesión de miembros de la Policía Federal, la Bonaerense y el Servicio Penitenciario, entre otras fuerzas de seguridad, pero no se pudo observar a uniformados participando del encuentro. En distintos momentos, los organizadores justificaron las acciones emprendidas por las Fuerzas Armadas durante la década del 70, en lo que llamaron "una guerra". Además, pasaron un video con fotos de las víctimas de ataques de las organizaciones guerrilleras, principalmente Montoneros y ERP, aunque también incluyeron las de los fallecidos en el asalto al cuartel de La Tablada en 1989. El pedido de amnistía fue mencionado expresamente al principio del acto y al final, pero rozó los discursos, las adhesiones y las expresiones de los asistentes, pese a que los organizadores habían señalado que no iban a pedir el cierre de las causas reabiertas contra represores por la derogación de las "leyes del perdón". "Basta de designios políticos contrarios a la Constitución Nacional. Éste es un Gobierno que rompe la juridicidad y que rompe los tratados por la paz. La Argentina necesita un Gobierno conciliador, que apele a la concordia", enfatizó Sacheri. También se leyó un mensaje atribuido al cardenal Jorge Bergoglio, que instó a los argentinos a "arrepentirse" por los "errores del pasado". "Estos hechos del pasado, que nos hablan de enormes faltas contra la vida y la dignidad humana y de desprecio contra las instituciones, son una oportunidad propicia para que los argentinos nos arrepintamos de nuestros errores", leyeron los organizadores del acto. Según pudo constatar la agencia Noticias Argentinas, el mensaje atribuido a Bergoglio fue firmado por el canciller del Arzobispado porteño, Horacio Risotto. Luego de la lectura de los mensajes tomó la palabra la titular de la Comisión de Homenaje Permanente a los Muertos por la Subversión, Ana Lucioni, quien advirtió sobre la necesidad de "revertir la avalancha de odio y venganza" que a su juicio padece el país. "Si no logramos revertir esta avalancha de odio y venganza todo se nos volverá en contra", alertó Lucioni en la Plaza San Martín, mientras los asistentes al acto levantaban pancartas con las fotos de las "víctimas de la subversión". Entre los asistentes estuvo María Cecilia Pando, la esposa del mayor Jorge Mercado, quien fue separado de la fuerza por las expresiones de la mujer. Al término del acto, Pando también apeló a "mirar hacia adelante y al futuro", antes de recluirse en el Circulo Militar, que está justo enfrente de la Plaza San Martín. Fuente: NA.