Miércoles 7 de Febrero de 2007, 10:32

La desaparición de López preocupa a Cristina Kirchner

| La primera dama Cristina Kirchner reconoció que la desaparición de Julio López provocó "la desazón de mucha gente", pero destacó la política de derechos humanos que desarrolla el Gobierno nacional, al participar de la ratificación de un convenio sobre la desaparición de personas en París.

"La desaparición de López ha provocado la desazón de mucha gente, pero tenemos la convicción absoluta a partir de este hecho, de que se debe llevar adelante esta política de Derechos Humanos que es la única garantía de que no vuelvan a suceder estos hechos que causaron tanto dolor", subrayó Cristina. Así se expresó la senadora durante la ratificación del Convenio Internacional sobre la Desaparición Forzada de Personas, que se realizó en el marco de una gira que incluyó entrevistas con funcionarios de la primera línea del gobierno y con la candidata socialista a las elecciones francesas, Ségolène Royal. Cristina, mencionada por distintos representantes del kirchnerismo como posible candidata presidencial, consideró que este convenio representa la "única garantía" de que casos como el del "testigo Jorge Julio López, quien atestiguó contra uno de los principales genocidas más terribles, el comisario (Miguel) Etchecolatz, no vuelvan a suceder". Este nuevo instrumento internacional, elaborado bajo la tutela de las Naciones Unidas, obligará a todos los Estados que lo ratifiquen a definir en sus legislaciones la desaparición forzada como crimen contra la humanidad. "Mi país, la República Argentina, a partir de la administración del presidente Néstor Kirchner, ha hecho de los derechos humanos uno de los pilares básicos de su política", sostuvo la primera dama al abrir la ceremonia que se realizó en la sede de la cancillería francesa. Subrayó que "los tres poderes del Estado coincidieron en consagrar a la memoria y al derecho a la verdad como una cuestión de toda la sociedad" y destacó que el Gobierno declaró "la nulidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final que amnistiaban a los genocidas" de la última dictadura. Además, señaló que se deben llevar adelante los juicios contra los responsables del terrorismo de Estado, ya que es la "única garantía" de que éste no se repita. La senadora estuvo acompañada por el canciller Jorge Taiana, la titular de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora e invitada de honor, Marta Ocampo de Vázquez; y las presidentas de la Asociación Madres de Plaza de Mayo y Abuelas de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini y Estela Carlotto, respectivamente. "Comenzamos una nueva etapa con gran satisfacción y alegría", aseguró Ocampo de Vázquez, quien representó también a la FEDEFAM (Federación Latinoamericana Familiares de Detenidos-Desaparecidos). Animó, además, a continuar trabajando para que la Convención Internacional contra las desapariciones forzadas sea ratificada por todos los países que la autenticaron, entre los cuales no se encontraba Estados Unidos. Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Philippe Douste-Blazy, leyó un mensaje del presidente Jacques Chirac en el que éste recordó el "grito de alarma" en denuncia de las desapariciones masivas que Julio Cortázar lanzó en un coloquio sobre "el rechazo del olvido" celebrado en París en 1981. "Este acto fundador encuentra hoy su desenlace gracias a una excepcional movilización internacional", puntualizó Douste-Blazy e hizo un llamamiento a todos los Estados para que ratifiquen el texto cuanto antes, idealmente "antes de final de año".