LINIERS | La entrada de ganado fue otra vez menor y el índice de novillo trepó a $2,58. La Casa Rosada analiza nuevas medidas como intervenir el Mercado de Liniers o extender a un año la suspensión de las exportaciones, que comenzó a regir hoy por seis meses.
En el día de la entrada en vigencia de la suspensión por 180 días de las exportaciones de carne vacuna, ingresaron esta mañana sólo 6.069 cabezas de ganado al Mercado de Hacienda de Liniers, lo que provocó un aumento del 5 por ciento en el Indice de Novillo que pasó de 2,451 a 2,581.
Tras el récord del viernes último, cuando en una sola jornada llegaron a este importante centro concentrador más de 25 mil cabezas, en los dos primeros días de la semana ingresaron en total poco más de 8.700 animales, menos del 40 por ciento de lo esperado, y el Indice de Novillo -que venía en baja- registró un alza del 5 por ciento.
El Gobierno decidió la suspensión de las exportaciones de carne por un período de 180 días porque se produjo un aumento de precios en el mercado interno "tanto inusitado como injustificado", según se publicó en el Boletín Oficial de ayer.
De esta manera busca estabilizar el precio de la carne, tras fracasar varios intentos de acuerdo.
El enfrentamiento entre el Gobierno y los ganaderos lleva ya varios meses desde que las entidades representantes del campo se levantaron de la mesa de las negociaciones por no incluirse en el acuerdo una baja de las retenciones a las exportaciones que se mantuvieron en el 15 por ciento.
Pese a ello, el Gobierno redobló la apuesta y amenazó con aumento de retenciones, mientras que los precios seguían en alza y el Mercado de Liniers cada vez menos abastecido.
En este contexto, el Ejecutivo anunció la suspensión de las exportaciones de carne, tras lo cual entró en Liniers una cantidad de animales récord que no se daba desde hace años y en un solo día se registraron bajas de hasta el 20 por ciento en el valor del kilo vivo.
Sin embargo, el precio de la carne aún continúa sin bajar en los mostradores y los carniceros denuncian una caída de hasta el 30 por ciento en las ventas.
De no trasladarse las bajas de Liniers a los consumidores y de continuar escasamente abastecido este importante centro concentrador, el Gobierno evalúa distintas opciones para ejercer aún más presión sobre el sector y para lograr su objetivo de contener la inflación, una de sus principales preocupaciones.
Entre ellas, no descarta la posibilidad de cambiar de manos la consignación del Mercado de Hacienda de Liniers ni prorrogar por 180 días más la suspensión de las exportaciones.
Por eso, durante diez días trabajará en Liniers un grupo de inspectores de Defensa de la Competencia, dependiente del Ministerio de Economía, para fiscalizar que no haya especulaciones en las operaciones de ese mercado.
Fuente: NA.
