| La Iglesia Católica abogó ayer desde la Basílica de Luján por un “diálogo” que “no signifique prevalecer o imponer” en medio del conflicto entre el Gobierno y el agro y sostuvo que esa instancia se alcanza “cuando uno se pone en el lugar del otro y se llega a algo en común”.
Así lo afirmó el vicepresidente segundo del Episcopado y arzobispo de Mercedes-Luján, Agustín Radrizzani, durante su homilía en la “misa por la Patria” que se desarrolló en ese templo imponente en presencia de todos los obispos del país.
“Combinemos en nuestro espíritu que el diálogo es fecundo cuando uno se pone en el lugar del otro y llegan a algo en común”, solicitó Radrizzani, quien además abogó por “encontrar la manera de vencer el egoísmo y la inequidad”.
Advertidos del clima de confrontación social en el marco del enfrentamiento entre la Casa Rosada y el sector agrario, los obispos que participan de la 95 Asamblea Plenaria del Episcopado se trasladaron hasta la mayor basílica del país para realizar una plegaria a la Virgen destinada a alcanzar un “encuentro fraterno” entre los argentinos.
“Virgen de Luján, venimos hoy a tu casa para pedirte por nuestro pueblo. Le pedimos a tu hijo Jesús por nuestra Patria”, apuntó Radrizzani a través de un mensaje que evitó confrontar directamente con el Gobierno y tuvo como destinataria también a la sociedad que se movilizó en favor del agro.
Abogó, así, por “encontrar la manera, venciendo el egoísmo de superar toda inequidad” para que “no suceda entre nosotros lo que sucedía en la comunidad de Corinto, que unos tienen demasiado y otros pasan hambre”.
