| El viaje entre las provincias de Mendoza y San Luis que hizo una supuesta locomotora "fantasma" de ALL Central no sería otra cosa que un exitoso experimento de la compañía ferroviaria para bajar costos. En las últimas horas se supo que la modalidad sería implementada a la brevedad, en conjunto con otras como la de no utilizar las vías para reducir descarrilamientos.
Lo que en principio se presentó como un sabotaje no sería otra cosa que la prueba piloto de un programa de la compañía ferroviaria que recientemente, en el marco de la renegociación de su contrato de Concesión, recibió el “visto bueno” del Congreso Nacional que la mantiene como operadora de dos ramales de carga, uno llamado Central, que une Cuyo con Buenos Aires y el Mesopotámico, que recorre el litoral y lo vincula también con la Capital Federal.
Tras varias horas se supo que el jefe de relaciones institucionales de ALL, Dr. Hernán Pesqueira mintió en sus declaraciones a la prensa cuando sostuvo que “se trató de un sabotaje llevado adelante por un tercero”, con el propósito de -cumpliendo directivas del más alto nivel- disimular que lo que se filtró en los medios no era otra cosa que un viaje experimental de un novedoso sistema que pretenden implementar para bajar costos operativos. Esto quedó en evidencia cuando Pesqueira agregó que "en todo momento desde la empresa estuvimos controlando la situación, y que más allá de las versiones que hayan circulado, en ningún momento el tren estuvo a la deriva". Por último fuentes dignas de alto crédito aseguran que el próximo ensayo será no utilizar las vías para evitar descarrilos. Ampliaremos.
