| Los radicales K oficializaron su intención de conformar una línea interna en la UCR y definieron una Mesa de Conducción, formada por el vicepresidente Julio Cobos, los gobernadores Miguel Saiz (Río Negro) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y el funcionario de la Cancillería Horacio Quiroga.
Al concluir un encuentro partidario en Junín, difundieron un documento consensuado reclamando "que en forma inmediata se levanten las intervenciones a los distritos, las suspensiones aplicadas a dirigentes y se dejen sin efecto las expulsiones de las que importantes hombres del partido han sido objeto".
Pidieron en ese marco "una reafiliación sin condicionamientos" y que "se revean las decisiones adoptadas por las últimas Convenciones Nacionales de la UCR". "Si todos los radicales queremos la unidad de la UCR, debemos partir de la realidad que hoy nos toca", indica el texto final del encuentro, que se refiere a un radicalismo "dividido y sin siquiera la formalidad de un candidato a presidente propio".
"Así, los diferentes sectores de nuestro partido, acompañaron tanto a la fórmula encabezada por Roberto Lavagna, como a la encabezada por Cristina Fernández de Kirchner y a las de otras fuerzas políticas también", señalaron. Por ello, pidieron "un partido que vuelva a ser competitivo en el nivel nacional, pudiendo ser una alternativa de gobierno el día de mañana".
Durante el encuentro cerrado que se desarrolló en la Posada del Sol, los radicales afines al gobierno nacional iniciaron las deliberaciones tras los discursos del subsecretario de Asuntos Institucionales de la Cancillería, Horacio "Pechi" Quiroga, y del vicepresidente Cobos. Allí, Quiroga ratificó la intención de no abandonar la UCR y de conformar un espacio propio dentro del centenario partido. Esa postura fue refrendada por Cobos: "La UCR necesita definir su conducción y que abra puertas a todos los sectores", subrayó el mendocino.
Cobos destacó que el gobierno kirchnerista "está haciendo muchas de las cosas que se debían hacer y que durante gobiernos anteriores no se hicieron", aunque advirtió sobre la necesidad de mantener una "identidad propia" ante eventuales desacuerdos. Además, tuvo palabras de reconocimiento hacia el ex presidente Raúl Alfonsín, expresando una voluntad de acercamiento entre los sectores antagónicos.
Al frente de las negociaciones para lograr el levantamiento de intervenciones y suspensiones y la reafiliación masiva quedarán Cobos, Saiz, Zamora y Quiroga. Además, se acordó iniciar las gestiones para lograr la realización de un congreso federal con la participación de delegados de todas las provincias. Tras las deliberaciones, se celebró un plenario coronado con un acto en el Club Los Indios al que asistieron unas 300 personas, del cual salió el documento consensuado de la fuerza.
Del encuentro también participaron el gobernador de Corrientes, Arturo Colombi, y el titular del bloque de Diputados, Daniel Katz, además de intendentes, legisladores y otros dirigentes.
