Domingo 6 de Diciembre de 2009, 14:33

Más provincias, al borde de las cuasimonedas

| Al menos seis gobernadores analizan fuertemente la emisión de bonos para pagarle a sus proveedores ante la asfixia del déficit fiscal, lo que se sumaría a la generación de nuevas deudas y dejará a las provincias al borde de las cuasimonedas.

La suspensión por dos años de la ley de Responsabilidad Fiscal (25.917), aprobada por el Congreso hace una semana, y la emisión de bonos por parte de la administración bonaerense de Daniel Scioli abrieron un camino que ahora tomarían otras provincias. El rojo primario de todas las provincias, según estimaciones privadas, alcanzaría este año los 13.400 millones de pesos y ascendería a entre 16.400 y 17.300 millones de pesos (1,4 del PBI) después del pago de los intereses de deuda, que en total llega a 100.000 millones de pesos. Ante un déficit que se ubicaría en torno a los 5.600 millones de pesos, el gobierno de Scioli resolvió emitir un bono a 12 meses por 850 millones de pesos para pagarle a proveedores y contratistas del Estado. Con esta estrategia, el kirchnerista espera reducir a 90 días el promedio de demora en el pago a las empresas del sector, que estaba llegando ya a 180 días, el doble del promedio. Los economistas sostienen que la senda para arribar a las cuasimonedas se inicia con el pedido de dinero al banco público de la provincia y la generación de deuda con proveedores y contratistas, lo cual ya fue realizado por la mayoría de las gobernaciones. Además de Buenos Aires, las cuentas presionan a Santa Cruz, Córdoba, Tierra del Fuego, Santa Fe, Catamarca, Jujuy y Capital Federal, por lo que los gobernadores ya piensan en emitir bonos para pagar a acreedores, y no descartan las cuasimonedas. La Legislatura mendocina, en tanto, autorizó esta semana al gobernador Celso Jaque la adhesión a la suspensión de la Ley de Responsabilidad Fiscal y la emisión de deuda por 420 millones de pesos para contrarrestar el rojo.La provincia emitirá un título que sería absorbido en un 50 por ciento por la Casa Rosada, unos 175 millones serían colocados en el Banco Nación y el resto en acreedores particulares. Por su parte, el rojo de Chaco será de 300 millones, y el de Corrientes, de 220; mientras que San Luis, Salta, La Rioja, Entre Ríos, Chubut, San Juan y Santiago del Estero tienen las cuentas más o menos controladas. Los gobernadores no sólo tienen la presión de la caída de la recaudación, el pago a proveedores y el cumplimiento de salarios y aguinaldo, sino también el plus de hasta 350 pesos reclamado por los empleados públicos para fin de año. Por ello, el análisis sobre una posible emisión de cuasimonedas, tal como ocurrió en la crisis entre 2001 y 2002, volvió a instalarse en las gobernaciones como un posible “mal necesario” ante la falta de fondos. [b]El ruego de los gobernadores[/b] Los gobernadores tendrán un cierre de año difícil por el rojo fiscal que apremia las finanzas provinciales y ruegan que la presidenta Cristina Kirchner omita anunciar un plus salarial para los empleados públicos, porque no podrían afrontarlo. En el seno de los gremios —aun de los más cercanos al oficialismo como la CGT-- aseguran que la inflación corroe cada vez más la capacidad adquisitiva de los salarios y por ello piden -en voz baja por ahora- que el Estado no otorgue un extra. Gobernadores consultados por Noticias Argentinas, en tanto, afirman, que las cuentas están “muy justas” para pagar sueldos y que aún “faltan unas monedas” para llegar al aguinaldo, por lo que no sería posible un plus. A pesar de haber aumentado los impuestos, la recaudación de las provincias se desplomó este año por la caída de la actividad tanto industrial como agropecuaria (por la crisis externa y la sequía) y la situación se complicó con las subas salariales. Los gobernadores tuvieron que desviar fondos de obras públicas para cumplir con los sueldos, lo cual se convirtió en un arma de doble filo porque frenó la construcción e hizo perder miles de empleos. Fuente: El Diario.