| Los propietarios reclaman mejoras en la rentabilidad, porque el sector se ve fuertemente afectado por los impuestos que representan más del 60 % del precio final que pagan los clientes. La medida abarcará además al expendio de GNC.
Unas 4.500 estaciones de servicio, en todo el país, no venderán combustible entre las 14 y las 22 de mañana. Reclaman mejoras en la rentabilidad del sector, afectado por los crecientes costos operativos y altos componentes impositivos en el precio de los surtidores.
La Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha), pidió una "intervención urgente" del gobierno frente al probable cierre de unas 1.500 estaciones de servicio "que dejarían sin sustento económico a más de 20.000 familias", dijeron.
Fuente: Campo en Acción.
La Cecha explicitó que "más del 60% del precio de los combustibles corresponde a impuestos que merman más los ingresos de las estaciones, mientras los balances de las compañías petroleras multinacionales exhiben excelentes resultados".
El paro afectará no sólo la venta de combustibles líquidos, sino que abarcará además al expendio de GNC, aún cuando la situación en torno de ese combustible difiere de lo que sucede con los costos de comercialización de los combustibles líquidos.
[b]En todo el país[/b]
La Federación de Empresarios de Combustibles (Fecra), que reúne a los estacioneros de la provincia de Buenos Aires, ratificó la medida ante "la pérdida de rentabilidad del sector. Nuestros ingresos nominales -dice la entidad- están congelados desde hace tres años, pero nuestros costos por aumento de salarios, de la energía eléctrica y de los insumos, aumentaron entre 120 y 130 por ciento".
Sólo los estacioneros sanjuaninos han expuesto que sostienen el reclamo pero que no irán al paro, a la espera de las gestiones del gobernador de esa provincia, José Luis Gioja.
[b]Complejo panorama[/b]
Los costos fiscales son intocables para el gobierno, y el precio de venta de los combustibles es de gran incidencia en el índice de inflación que tanto cela la Casa Rosada. A eso se suman los reclamos salariales de empleados de estaciones en Capital Federal, donde las paritarias están abiertas (no así en Santa Fe) y la falta de gasoil en el norte, una situación que obliga al gobierno a una compleja operatoria para importar combustible y desgravarlo, lo que genera demoras en la provisión habitual sobre el final de cada mes.
