| La ministra de Economía, Felisa Miceli, encabezará hoy un acto de repudio a la dictadura militar instaurada el 24 de marzo de 1976 y en el que se referirá puntualmente a la política económica que llevó adelante José Alfredo Martínez de Hoz.
El acto está previsto para las 12 en la entrada del Ministerio de Economía, sobre la calle Hipólito Irigoyen, donde se colocará una placa "En homenaje a los desaparecidos que trabajaron en el Ministerio de Economía y en repudio a la instauración de la política económica de la dictadura. 24 de marzo-2 de abril".
La fecha 2 de abril en la placa no es antojadiza, ya que ese día de 1976, Martínez de Hoz presentó a los argentinos su plan económico.
Durante el acto, Miceli recordará el congelamiento de salarios, eliminación de los controles de precios, devaluación del peso, suspensión de las actividades gremiales y el endeudamiento externo que se generó; además, no faltará una mención sobre "la plata dulce" que favoreció la importación.
El objetivo de Miceli será contraponer estas políticas de la dictadura con las que lleva adelante el gobierno del presidente Néstor Kirchner.
En aquel "Programa de recuperación, saneamiento y expansión de la economía", presentado el 2 de abril de 1976, Martínez de Hoz, con el apoyo de empresarios y organismos internacionales de crédito, se hablaba de la política salarial en su último ítem.
En él señalaba: "Debe suspenderse toda actividad de negociación salarial entre los sindicatos y los empresarios, así como todo proceso de reajuste automático de salarios de acuerdo con índices preestablecidos".
Respecto del régimen de precios "se deroga el sistema de control de precios existente y se establece un régimen de libertad de precios con las siguientes características: El Estado ya no fija precios...Le vamos a trasladar la responsabilidad de la determinación del nivel de los precios a los empresarios".
En materia presupuestaria proponía: "Reducción del gasto fiscal" mediante "la racionalización de la administración nacional central, la eliminación del déficit de las empresas estatales, reducción gradual y eliminación del aporte federal para cubrir los déficit de los presupuestos provinciales y encuadramiento de las obras públicas en los límites máximos posibles permitidos por una financiación genuina no inflacionaria".
La dictadura, a través de Martínez de Hoz, promovía un "aumento de los ingresos o recursos presupuestarios, incremento sustancial de la inversión productiva del país", al tiempo que en materia agropecuaria priorizaba "toda producción exportable, por lo tanto se modificarán los precios relativos agropecuarios que han sufrido una fuerte depresión".
Fuente: Télam.
