Miércoles 19 de Octubre de 2005, 14:15

Monitorean el ingreso de aves migratorias

| Argentina fue declarada libre de gripe aviaria. Pero ante el temor que existe en Europa, se dispuso un monitoreo y control sobre las aves migratorias. En caso de detectarse el letal virus se establecerán barreras sanitarias y se declarará la cuarentena en la zona. Entre Ríos aporta el 69 % del volumen de exportación de carne blanca.

Existe cautela, también preocupación, pero desde Entre Ríos, se advirtió que se está monitoreando y vigilando todo el territorio para evitar el ingreso de la cepa del virus H5N1 en aves, que puso en jaque a los europeos. Si bien Argentina no está dentro de la ruta de la mortal gripe aviaria, desde la Nación y conjuntamente con las provincias se puso en marcha un operativo de sanidad avícola. El monitoreo consiste en controlar las aves migratorias, para lo cual se efectuó un mapeo de las distintas zonas. “Son escasas las posibilidades de que ingrese el virus. No obstante, se están encarando todas las medidas sanitarias y de prevención. En caso de detectar el virus, en un determinado lugar se pone en cuarentena a toda la región para evitar su propagación”, indicó el secretario de la Producción, Daniel Welschen. Por su parte, los empresarios avícolas locales hacen su propio chequeo, pero en el mercado. Es que del total de las exportaciones de carne aviar en el país, el 69 % del volumen lo aporta la provincia de Entre Ríos y, en caso de haber una restricción en la compra por parte de los europeos, el efecto sería más que negativo para los seis frigoríficos entrerrianos exportadores de pollo. El virus de la gripe aviaria generó temor entre los consumidores europeos, situación que podría llevar a una restricción en la compra, aunque el contagio del mal no se produce por el consumo de pollo. “Argentina no tiene influencia aviar, pero de todas maneras, tenemos armado un programa sanitario en caso de detectar algunas de las aves migratorias con el virus. Ese monitoreo permite localizar el lugar de las aves, sobre todo los patos silvestres y hacer el control respectivo”, indicó el funcionario provincial. “En caso de detectar el virus, se hace una estrategia de bloqueo, del que participan distintas áreas como Senasa, INTA, Salud Pública de la Nación, la Secretaría de Salud de la provincia y la de Producción y a toda la zona de influencia se la pone en cuarentena”, detalló Welschen, al tiempo que indicó que “Argentina está preparada, pero además, son pocas las posibilidades de que ingrese el virus”. En cuanto a las exportaciones, el funcionario comentó que los empresarios entrerrianos no tuvieron, hasta el momento, variaciones en las exportaciones. “Siguen vendiendo lo mismo, según nos informaron los empresarios”, indicó Welschen. Sin embargo, desde el Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA) se confesó que las “noticias” del brote de la gripe aviaria no “son muy alentadoras” y que el consumo mundial de carne de ave se ve amenazado ante cualquier problema que pueda surgir. Si bien existe una cierta inquietud entre las autoridades sanitarias argentinas y los empresarios avícolas, se teme que la enfermedad detectada en Europa perjudique el ciclo expansivo que tuvo la actividad, que actualmente registra una tasa de ocupación cercana al 100 %. Ese crecimiento se logró por la aparición del virus en Asia, hace dos años, lo que permitió que Argentina ingrese en mercados internacionales. Tanto es así, que las exportaciones argentinas pasaron a tener 24 destinos para huevos y ovoproductos y 56 destinos para las carnes blancas. Con ese impulso, la industria desarrolló proyectos de crecimiento que planean cuadruplicar la capacidad instalada y el monto exportado de los huevos y derivados para 2015 y duplicar las de carne de pollo para 2007, según informó el diario La Nación. Tal como lo indicó Welschen, Argentina cuenta con una situación sanitaria avícola de prevención, pero además fue declarada internacionalmente libre de la gripe aviaria. Sin embargo, la facilidad de propagación de la enfermedad (a través de aves migratorias, entre otras cosas) y la fragilidad de algunos controles motivaron la elaboración de un programa del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) con financiamiento privado, se indicó. Asimismo, desde el Senasa se informó que se intensificaron los controles en los establecimientos avícolas sobre las aves migratorias y las de “transpatio” (que se crían para subsistencia) y que permanece vedada la importación de animales vivos o derivados de los países que no acrediten la ausencia del virus. La gripe aviaria es una zoonosis, es decir que el virus se contagia al ser humano, con lo cual el desvelo trasciende el plano comercial. No obstante, la aparición de un caso de gripe en el país provocaría, en primer lugar, la paralización de las exportaciones avícolas durante un mínimo de 180 días, hasta que pueda garantizarse la erradicación del brote. Además, crearía un marco de fuerte desconfianza en los consumidores locales. En este sentido, según actores del sector privado, uno de los puntos débiles del país es la escasez de veterinarios del Senasa destinados exclusivamente al control y la fiscalización del sector avícola.