| El hombre de 20 años que se hallaba en estado vegetativo tras ser baleado en la nuca, al igual que su hermano, en un confuso episodio registrado en el interior de una precaria casilla de madera que compartían en el barrio Nahuel Hue II, murió tras varios días de agonía.
Javier Alejandro Soto, murió ayer, un día después de producirse el deceso de su hermano Juan Andrés, de 22 años, y a 48 horas del hecho que lo había dejado en estado vegetativo. Javier había recibido un disparo en la nuca mientras discutía con su hermano y se encontraba internado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Zonal. En tanto, la hermana de los jóvenes informó que los órganos de ambos fallecidos fueron donados al Incucai, mientras que la novia de uno de los muchachos, continúa detenida sospechada por el delito de "homicidio simple".
El trágico hecho ocurrió cerca de las 5:50 de la mañana del pasado miércoles en el interior de una precaria casilla de madera ubicada en un terreno del barrio Nahuel Hue II, cuando vecinos del lugar escucharon una fuerte discusión que terminó cuando se oyeron al menos dos disparos. De inmediato, se hizo presente en el lugar personal de la comisaría 28, que halló dentro de la casilla los cuerpos de los hermanos que presentaban disparos de arma de fuego en al nuca.
Ambos jóvenes fueron trasladados al Hospital Zonal Ramón Carrillo, donde los ingresaron en la Unidad de Cuidados Intensivos. Juan Andrés fue intervenido quirúrgicamente en la tarde del miércoles -cerca de las 14:00-, en tanto que Javier se hallaba en estado vegetativo a raíz de la seria lesión. Las primeras versiones indicaron que hermanos Soto estaban solos en el interior de la vivienda, pero otra señala que había una joven de 19 años, quien fue detenida y se encuentra alojada en la Comisaría 27 del barrio Melipal.
