El intérprete de numerosas películas, entre las que se destacaron "El diablo metió la pata" y "El derecho a la felicidad", estaba en coma y con respirador automático desde que protagonizara el choque tras lo cual hubo que internarlo en una clínica de la Capital Federal.
Felipe Enzo Viena, tal su nombre real, que era oriundo de Rosario, tuvo una larga y prolífica trayectoria, supo ganarse un lugar destacado y de aprecio en el imaginario colectivo, tan permeable a la televisión, aunque estuvo fuera del país allá por 2004 cuando, instalado en Perú, relanzó su carrera con producciones de gran nivel y jerarquía.
Enzo tenía toda la pinta del seductor "piola" y que se contraponía a uno de sus mejores personajes, el de "Pascual Pasaguay", al que siempre le "pasaban todas".
Fuente: Crónica.